Manchester frente al mar: De tragedias y culpas
Manchester frente al mar se perfila como una de las favoritas del año. Casey Affleck interpreta a un hombre cuya vida se ve afectada negativamente por un momento de equivocación.
Los especialistas dicen que cuando se quiere ayudar a otros es necesario tener paz interior, depurar toda toxicidad emocional. Así, la asistencia va de mejor manera, es más gratificante y con resultados positivos. El cineasta Kenneth Lonergan ya ha explorado, a modo de comedia y drama, historias que muestran personajes con miedos, manías, aflicciones, como el caso de Margaret (2011), en la que una estudiante que luego de sufrir un accidente y bajo la encrucijada de continuar con su vida y sanar o poner a prueba sus propios principios morales y éticos, se ve enfrentada a una situación de crisis. O en Puedes contar conmigo (2000), era la muerte de los padres y su efecto sobre dos hermanos que sufren la pérdida;
Ahora reaparece dirigiendo y escribiendo Manchester frente al mar (Manchester by the Sea), un filme que oscila entre la tragedia y el melodrama, pero que recorre, mediante una serie de escenas en retrospectiva y flashbacks, las graves heridas que los accidentes de la vida le han infligido al protagonista, que aún no han cicatrizado.
Casey Affleck encarna a Lee, un gasfitero obligado a regresar a su pequeño pueblo natal tras enterarse de que su hermano ha fallecido. Allí se encuentra con su sobrino adolescente (Lucas Hedges), de quien tendrá que hacerse cargo, mientras que al mismo tiempo Lee se siente destrozado interiormente debido a una tragedia de su pasado que ha mantenido en secreto durante todo este tiempo. Además, tiene que lidiar tanto con su exesposa Randi (Michelle Williams) como con la comunidad a la que regresará.
Los artífices
Lonergan destaca, como fondo, el paisaje que se convierte en copartícipe de la historia y que lleva el nombre del filme: un pueblo de pescadores (en Massachusetts) orgulloso de su identidad que asume al mar como un elemento geográfico compartido con la ciudad de Boston, pero también se sabe distante en el aspecto cultural, de la misma manera que a nivel emocional se siente Lee, alejado de todas las personas que se cruzan en su vida. Así, el encanto natural del entorno consiste en la combinación de atmósferas invernales, paisajes costeros e interiores opresivos que responden a las emociones de luto y melancolía del protagonista, un hombre hermético y agresivo que luce por su sencillez, honestidad y transparencia.
“Fueron Matt Damon y John Krazinsky quienes tuvieron la idea de contar esta historia. Me preguntaron si podría escribir el guion. Sentí curiosidad y acepté el trabajo. Al final Matt no pudo dirigirla y John estaba ocupado. Fue así como me convertí en el director de esta película”, explicó Lonergan.
Cuidar de su sobrino tiene un elevado costo añadido para el protagonista que intenta evitar como sea ir a su pueblo natal. “Hay demasiados recuerdos del pasado. Es un lugar muy pequeño. No puede dar un paso sin cruzarse con alguien que le conoce y que sabe lo que ocurrio´. Es una aute´ntica tortura ver a toda esa gente. Pero tiene que ayudar a su sobrino. Puede elegir entre arrastrar a Patrick lejos del pueblo o vivir en un lugar que no soporta”, explica el realizador neoyorquino.
Desde su estreno en el Festival de Cine de Sundance del año pasado (sección World Premier), Manchester by the Sea no ha dejado de recibir elogios, varios premios y excelentes críticas.
Algo que gustó mucho a la actriz Michelle Williams, quien se dice una gran seguidora del trabajo de Lonergan, al igual que Casey Affleck. “Es muy auténtico. Todo lo que hace parece muy natural. Es capaz de sublimar las escenas, de elevarlas a un nivel superior. Trabajar con él es casi una experiencia espiritual”, asegura Williams.
“Cuando vi la película por primera vez en Sundance, me sorprendió mucho que la gente se reía, ocurrió varias veces. Pero al mismo tiempo la gente lloraba, fue increíble”, dice Affleck, quien, al igual que la película, ha recibido muy buenos elogios como el de Time Out: “Casey Affleck ingresa en la élite de los gigantes (de la interpretación) en un retrato de la aflicción, tremendamente conmovedor...”. Y acaba de recibir el Globo de Oro en la categoría mejor actor de drama.
Affleck añade: “Lonergan crea un misterio que atrapa al público. Se conoce y se quiere a los personajes antes de descubrir su pasado. Todos han pasado por malos momentos, algunos peores que otros. Cuando conocemos a Lee, busca una razón para seguir adelante y la encuentra en la relación con su sobrino. Hay momentos divertidos, otros muy tristes, pero sobre todo es real, muy real”.
El joven actor Lucas Hedges interpreta el papel del sobrino adolescente. Lonergan entrevistó a muchos jóvenes actores antes de escoger a Hedges, quien ya había trabajado en conocidas películas como Moonrise Kingdom y El gran hotel Budapest, ambas de Wes Anderson. “Lucas tiene muchi´simo talento. Es muy sensible y agradable. Aunque su papel es difícil, le ha aportado una tremenda carga emocional. Patrick ha pasado por muy malos momentos en su corta vida, pero nada ha podido con su energía. Es un optimista nato, y Lucas lo interpreta con total naturalidad. También es listo, duro, implacable y muy divertido. Fue emocionante verlo sacar todas estas cualidades de su interior a medida que construía el personaje”, dijo el director.
Se prevé su estreno en Ecuador el viernes 10 de febrero próximo. (A. C. J.) (I)