Sin exagerar
No son solo los adolescentes, es triste pensar que muchos adultos asocian la diversión con la embriaguez (‘Las fiestas y el alcohol’, diciembre 21). No conciben un momento de alegría o de esparcimiento sin que esté el alcohol presente. Y claro, no hay ningún problema con tomarse un trago, pero hay que cuidar que la emoción no nos lleve a pasarnos de la raya. Es cierto, muchas tragedias pueden ocurrir bajo los efectos del alcohol. Sí se puede pasarla bien sin necesidad de exagerar en la bebida. (O)
Rocío L.