Según encuestas mundiales, la enfermedad de Alzheimer ha crecido notoriamente en las últimas décadas, afectando a la mayor cantidad de personas. Este tipo de demencia se la liga a la senilidad, pero en el reportaje de salud (pág. 36) vemos que los estragos pueden detectarse mucho antes. Hay toda una generación pos-baby boomers que podría sufrir los embates sin que nadie se percate debidamente. Estamos hablando de personas mayores de cincuenta años. El crecimiento de la demencia también se debe a los conflictos y las crisis globales que se enfrentan ahora, de una manera mucho más radical e inmediata que en años anteriores. Es una alerta que cada persona debe asumir junto a su grupo familiar y social: tener la sensibilidad para fijarnos bien no solo en nuestra propia conducta individual, sino poder sentir lo que puede significar serios problemas en nuestros seres allegados.