El Editor Carlos A. Ycaza
El escritor aventurero
El escritor aventurero
Son memorias del hombre que para muchos fue el más grande de todos los escritores de EE.UU., con un espíritu inagotable para descubrir paisajes exteriores e interiores de la sociedad de su tiempo.
En 1866, Mark Twain hizo un viaje por vapor desde San Francisco, en California, hasta el puerto de San Juan del Sur, en Nicaragua, cruzando el lago Cocibolca, para llegar a San Juan del Norte y al Atlántico.
El cruce fue el seguimiento de esa quimera del oro que llevaba a los norteamericanos a destinos ilimitados, que en el caso del escritor se realizó de este a oeste, porque su destino era Nueva York para seguir a más aventuras europeas. La travesía inspiró algunas narraciones incluidas en su libro Viajes con Mr. Brown. Ya en sus años finales, el escritor negaba que él gozó de estas aventuras en tierras lejanas. Pero quedan algunas anécdotas, escritas cuando tenía 24 años después de un recorrido por el río Ohio: “Me convertí en un ser nuevo y yo mismo me admiraba. ¡Era un viajero! Nunca antes yo saboreé tanto esa palabra”.