Lo primero que se me vino a la memoria revisando la nota de  psicología ‘Injusticias en la vida diaria’ fue la conexión inmediata con la crianza hogareña. Allí comienza todo. En mi caso, mi experiencia particular fue en la casa de mis abuelos (por eso la foto, que no es la de mi añorada casa)  hasta que hice maletas y volé a otras alturas antes de los 20 años.

Es el primer escenario de nuestra vida, donde se forjan los principios y valores que nos seguirán para siempre. Y también –desgraciadamente– los traumas, los resentimientos, las actitudes negativas que pueden degenerar en crueldades e injusticias.

Así que entremos al mes de julio, siempre con la memoria del oxígeno primario inculcado por nuestros antepasados: amor, comprensión, tolerancia...