La calle manda

11 de Enero de 2015

Sthéphane Ashpool afuera de su tienda Pigalle recién inaugurada en París.
Uo de los atuendos que lanzó Nike con él.
Los representantes del estilo callejero aparecen mayormente en fashion weeks, como en el de París (fotos de esta página).
Los representantes del estilo callejero aparecen mayormente en fashion weeks, como en el de París (fotos de esta página).
Los representantes del estilo callejero aparecen mayormente en fashion weeks, como en el de París (fotos de esta página).
Los representantes del estilo callejero aparecen mayormente en fashion weeks, como en el de París (fotos de esta página).
Los representantes del estilo callejero aparecen mayormente en fashion weeks, como en el de París (fotos de esta página).
Los representantes del estilo callejero aparecen mayormente en fashion weeks, como en el de París (fotos de esta página).
Los representantes del estilo callejero aparecen mayormente en fashion weeks, como en el de París (fotos de esta página).
En la mayoría de las aceras se observa un mix de atuendos de diseñador, prendas vintage, accesorios hechos a mano, artesanalmente o por ‘ellos mismos’ (DIY); todo esto como parte de un proceso por el cual los consumidores de moda valoran más las prendas de calidad, cómodas y funcionales, y exaltan la producción de la mano de obra local.
En la mayoría de las aceras se observa un mix de atuendos de diseñador, prendas vintage, accesorios hechos a mano, artesanalmente o por ‘ellos mismos’ (DIY); todo esto como parte de un proceso por el cual los consumidores de moda valoran más las prendas de calidad, cómodas y funcionales, y exaltan la producción de la mano de obra local.
En la mayoría de las aceras se observa un mix de atuendos de diseñador, prendas vintage, accesorios hechos a mano, artesanalmente o por ‘ellos mismos’ (DIY); todo esto como parte de un proceso por el cual los consumidores de moda valoran más las prendas de calidad, cómodas y funcionales, y exaltan la producción de la mano de obra local.
En la mayoría de las aceras se observa un mix de atuendos de diseñador, prendas vintage, accesorios hechos a mano, artesanalmente o por ‘ellos mismos’ (DIY); todo esto como parte de un proceso por el cual los consumidores de moda valoran más las prendas de calidad, cómodas y funcionales, y exaltan la producción de la mano de obra local.
En la mayoría de las aceras se observa un mix de atuendos de diseñador, prendas vintage, accesorios hechos a mano, artesanalmente o por ‘ellos mismos’ (DIY); todo esto como parte de un proceso por el cual los consumidores de moda valoran más las prendas de calidad, cómodas y funcionales, y exaltan la producción de la mano de obra local.
En la mayoría de las aceras se observa un mix de atuendos de diseñador, prendas vintage, accesorios hechos a mano, artesanalmente o por ‘ellos mismos’ (DIY); todo esto como parte de un proceso por el cual los consumidores de moda valoran más las prendas de calidad, cómodas y funcionales, y exaltan la producción de la mano de obra local.
En la mayoría de las aceras se observa un mix de atuendos de diseñador, prendas vintage, accesorios hechos a mano, artesanalmente o por ‘ellos mismos’ (DIY); todo esto como parte de un proceso por el cual los consumidores de moda valoran más las prendas de calidad, cómodas y funcionales, y exaltan la producción de la mano de obra local.

Ya es un hecho irrefutable: las aceras cada vez tienen más poder que las pasarelas para fijar tendencias. En estas páginas: inspiraciones urbanas europeas.

El estilo callejero tiene varios matices: los hipsters con sus lentes de marcos gruesos y gorros beanies, los preppies en sus camisas, las ultra girly cubiertas de estampados florales y tacones, los teddy boys que parecen dandies modernos...

Otros prefieren el streetwear, que es una tendencia con prendas supercómodas, que simulan la ropa deportiva, pero con mucha personalidad, con influencias de hip hop y culturas surf y skate. Para ellos han surgido marcas dedicadas a satisfacer sus ganas de conquistar las calles como Stussy, Urban Outfitters o Timberland.

Ahora se suma Pigalle, en Francia, dirigido a “chicos ‘ghetto’, jóvenes asiáticos” que al mismo tiempo “son compradores elegantes y excéntricos”, explica Stéphane Ashpool, el dueño de la marca que acaba de inaugurar su segunda tienda en París. La línea es casi desconocida, pero ha sido reconocida por Nike, con la cual lanzó una colección especial.

De la Ciudad de la Luz, Milán, Roma y otras metrópolis europeas vienen muchas de las inspiraciones para vestir globalmente, tanto de la alta costura, el ready-to-wear y también del estilo callejero, el cual lleva buen tiempo compitiendo con las pasarelas, los flashazos de las cámaras que persiguen looks exclusivos, enfocados en estos personajes que se atreven a hacer su ‘declaración de moda’ con una combinación de atuendos que ningún medio especializado dictó. Casi que sale de sus corazones. (I)

Fotos: NYT, www.onabbotkinney.com, www.blog.cihooy.com, www.galleryhip.com, www.marieclairvoyant.com, www.hectorsalasalmeida.com