Amiga falleció con cáncer
Hace varios años una amiga falleció con cáncer de mama. Ella me contó, en aquel entonces, que en su familia no había antecedentes de cáncer de ningún tipo. Hoy en día sus dos hijas de 18 y 22 años ya son madres, ¿qué posibilidades tienen ellas de padecer de cáncer de mama y aparte del autoexamen qué otro tipo de estudios deberían realizarse?
Andrés,
Guayaquil
El cáncer de mama es uno de los mejores ejemplos de transmisión hereditaria de una enfermedad maligna. Ventajosamente esto no ocurre en más de un 8% de los casos, lo que quiere decir que 9 de cada 10 casos de cáncer de mama no tienen nada que ver con la herencia. En el caso de la amiga en cuestión, sus hijas no tienen más riesgo que otras mujeres en padecer la enfermedad. Para hablar de transmisión hereditaria nos colocamos en el campo de la genética, con los genes BRCA1 y BRCA2, que son los responsables de esta transmisión. Los genes mencionados no solo aumentan el riesgo de padecer cáncer de mama en un 80%, sino también el de ovario en 56%, así como otros más. Para sospechar en su existencia deben existir al menos en la historia familiar 3 casos de cáncer del seno y al menos uno de ellos en la premenopausia. Con este historial se debe realizar el estudio genético a la búsqueda de las mutaciones deletéreas que son las que comprenden el riesgo. Sobre los exámenes de despistaje general, la mamografía a partir de los 40 años y el autoexamen son los más útiles. Pero el eco de mama es más aconsejable en mujeres jóvenes con alguna anomalía o síntoma sospechoso, esto sí guiadas por un especialista que conozca de la materia, en este caso, del mastólogo.
Dr. Mauricio Riofrío,
Oncólogo clínico-mastólogo. Telfs.: 244-9610, (09) 929-8384.
