Desconfía del profesor
Estudio en un colegio femenino, hay pocos profesores hombres. Uno de ellos tiene 30 años. Yo he sido muy amable con él, como todas las compañeras, pero hace unas semanas él me dijo el diminutivo de mi nombre a la hora de salida, yo le dije que no lo hiciera, porque así solo me dicen mis amigas y él me lanzó un beso. No sé si fue en son de broma, pero sin faltarle el respeto yo lo contradije y se puso furioso. Él me mira siempre. ¿Qué debo hacer?
Anónimo,
Guayaquil
Entiendo que pueda ser un poco incómoda la presencia de profesores hombres en un colegio mixto, sin embargo, es necesario que existan profesores y profesoras, ya que eso permite que los niños y jóvenes puedan conocer y palpar la diversidad, entendiendo que el mundo es variado, y que hay hombres y mujeres, cómo nos comportamos, cómo nos relacionamos. No hay que vivirlo como una amenaza.
En muchos casos existen profesores (hombres y mujeres) que tienen un trato afectivo, amigable, cariñoso, con sus estudiantes y lo hacen con el único y sano afán de lograr un vínculo con ustedes, ganarse la simpatía, la confianza y la apertura en esa relación profesor-estudiante, lo cual será de mucho bien para su aprendizaje y crecimiento. Esto no quiere decir que no haya existido situaciones de acoso de profesores a estudiantes con otras intenciones, ha ocurrido a lo largo de la historia.
También puedo decir que, en muchas ocasiones, los adolescentes (chicos y chicas), por el periodo de cambio en el que se encuentran (biológico, emocional, social), suelen malinterpretar estos comportamientos de sus maestros y creer que están siendo vistos de otra manera más especial o que viven algún tipo de acoso o morbo. Ustedes, los adolescentes, tienden a confundirse así, y eso es parte de su periodo de adolescencia. A partir de estas dos reflexiones sobre el comportamiento de los maestros y la adolescencia, la invito a pensar en lo siguiente:
1. Es necesario que trate de recordar y recapitular si el profesor ha sido así siempre, únicamente con usted. Esto hay que recordarlo de manera objetiva, con situaciones específicas.
2. Si realmente piensa que el profesor tiene otro tipo de intenciones, debe conversar con sus padres, ya que ellos son los adultos a cargo y quienes deben darle una solución a esto, hablando con el profesor o con las autoridades del colegio.
3. Es necesario tener en cuenta que, si se llegara a tratar de un acoso, actualmente las leyes amparan a los adolescentes en este tipo de situaciones.
4. Si ha sentido que estas situaciones con el profesor afectan su estado de ánimo, vendría bien conversar con un psicólogo(a), ya sea del colegio o particular. La consulta particular sería mejor porque así tendría usted su propio espacio, privado y confidencial, para poder hablar de las cosas que estén ocurriendo. (F)
Christian Arias Toscano,
Psicólogo clínico
Telf.: 099-386-8695
Email: psic.arias@hotmail.com