Doble personalidad

No hay cambio de personalidad, es simplemente una desinhibición comportamental sobre una base biológica de intolerancia patológica al efecto del alcohol la que permite estas manifestaciones, por concepto el alcohol rompe el freno de comportamientos controlados por la razón que pertenecen a la corteza cerebral y se manifiestan acciones que se originan en el sistema límbico en el centro del cerebro del que parten nuestras emociones y nuestras más oscuras pasiones o deseos como los que usted manifiesta cuando consume licor. En el cuadro clásico dicha liberación se da con dosis mínimas de alcohol, pero es difícil determinar dichas dosis mínimas porque son apreciaciones subjetivas. Habría la posibilidad de una disfunción cerebral en el lóbulo temporal derecho y esta se puede registrar con electrodos que capten actividad profunda, lo cual a veces es muy difícil de obtener. Razones y explicaciones científicas para dicha conducta existen y pueden ser demostradas en equipos de investigación. Con fines prácticos, lo único claro en este caso es que su mejor opción es no beber y mantenerse sobrio. Permita que otros comportamientos que provienen de las mismas regiones cerebrales se manifiesten, una muy particular es la espiritualidad que proviene del mismo sistema límbico, especialmente la amígdala cerebral del lóbulo temporal derecho. Una espiritualidad sana es el ejemplo más claro de dichas conductas que son parte de nuestra dotación biológica, producto de la selección natural, ya que no solamente lo son la violencia y sexualidad, sino otros como el mencionado, que sumados a la empatía son parte de nuestra naturaleza, recuerde que si las tenemos obedecen a una razón y en este caso es la de una mejor convivencia social. Usted elige.

Dr. José Rodríguez Calle,
psiquiatra especializado en adicciones. Telf.: 099-995-2556.