Ella no ama a su esposo
Soy una mujer de 25 años, con tres hijos y llevo 11 años de casada con un hombre al cual ya no amo. Lo único que siento por él es cariño por su forma de ser con nuestros hijos. Se lo dije hace varios años, pero se hace de la vista gorda, y dice que no puede estar sin mí. Además, se deprime, llora y me hace sentir culpable. Siempre vivo dándole muchas oportunidades para que cambie, ya que es inseguro y le cuesta tomar decisiones. La verdad, quisiera estar sola, salir adelante con mis hijos, darme la oportunidad de conocer a alguien que escuche mis ideas, que comparta mis pensamientos, volver a enamorarme y que me aconseje cuando lo necesite. Actualmente, estamos dándonos otra oportunidad y él se está esforzando mucho para dejar de ser celoso y malhumorado, pero no consigo amarlo nuevamente. Le he dicho que ya no piense en mí, que yo estoy dispuesta a estar con él solo para que se sienta tranquilo y sea feliz, aunque yo no lo sea. Mi esposo tiene 30 años y nos casamos cuando yo tenía 15.
N.N.
Guayaquil
El amor nos hace soñar, pensamos que es maravilloso, que nos hace sentir diferentes, que nos sentimos apoyadas en todo momento y otros pensamientos aún más hermosos. Si usted tiene once años de casada y tres hijos, parecería que pensó que su amor por su esposo era así, y que siempre lo sería, y con el correr de los años quizás no se cumplieron sus expectativas, y como se casaron tan jóvenes, no tenían claros sus diferentes grados de motivación para hacerlo. Usted siguió soñando con su “príncipe azul”, que la rescataría y sueña que encontrará otra persona mucho mejor que su esposo y este triángulo amoroso que usted ha fabricado en su mente, le hace alejarse de la realidad. Las esperanzas fallidas son más negativas cuando más intensamente sueña usted con una situación idealizada, de que encontrará una mejor persona que su esposo, esto a veces puede ser inconsciente y al volver a la realidad usted se siente peor.
Sería conveniente que examine su realidad, debería pensar en qué cambios positivos trajo a su vida el matrimonio y el porqué se casó. Debería conversar con su esposo, en un sitio adecuado, tranquilo y sin interrupciones, qué aspectos positivos tiene cada uno, qué debilidades tiene cada uno, qué actitudes positivas tiene cada uno, qué actividades negativas tiene cada uno y cómo superar estos aspectos. Si su esposo es celoso y tiene mal humor, usted debería analizarse cómo es en realidad. Sus palabras de que no piensa en usted, y de que usted está dispuesta a estar con él solo para que se sienta tranquilo y feliz, aunque usted no lo es, son palabras crueles, piense en qué mal se sentirá él cuando usted dice esto, y por eso es inseguro e indeciso. No crea que una mujer divorciada y con tres hijos va a tener muchos candidatos que le brinden lo que usted busca, y además sus tres hijos no podrán reemplazar el amor que sienten por su padre, pues usted reconoce que su esposo tiene cariño por sus hijos y que es un buen padre. Sería positivo que analice mejor la situación, sería conveniente que acudan a un profesional, para que de una manera objetiva y realista tome su decisión.
Dra. Susana Torres de Rumbea,
psicóloga clínica.
Telfs.: 288-1875