Esposa golpeada
Tengo 25 años y un matrimonio de un año y medio. Antes de casarme tuve un año de enamorados. El problema es que mi esposo ha cambiado fatalmente, ya no es el tierno hombre que veía por mis ojos, sino mi verdugo. Llevamos cinco meses en discusiones y ha llegado a golpearme. Comenzó con una infidelidad de la que me enteré y me pidió disculpas. Pero lo disculpé porque lo amo y he querido a toda costa salvar mi matrimonio, pero después vino otra infidelidad y estaba dispuesta a perdonarlo si en realidad quisiera cambiar, pero no lo quiere hacer. Me grita, pues me dice que lo tengo harto, fastidiado y que me tiene coraje. La verdad es que me siento muy mal. No como, porque me produce náuseas solo de ver la comida y me duele mucho mi situación. Después de que me golpeó me pidió perdón y le volví a creer. Luego de un día volvió a ser el mismo tirano, a decirme que lo mejor es que estemos separados, que no hay nada en ese hogar, que no es feliz. Él tiene 25 años también. Necesito salir de este hueco, estoy muy deprimida.
H.M.,
Guayaquil
Es una situación muy dura para usted, pues es su primer año de matrimonio donde se conjugan las ilusiones de una nueva familia y el proceso de adaptación al esposo que uno eligió por amor para permanecer supuestamente toda una vida. La desilusión debe ser muy grande y lo que le voy a decir no es muy esperanzador, pues un hombre que la maltrata , que la traiciona no es sinónimo de cariño, aprecio o amor, nadie se comporta de esa manera, en nombre del respeto, ni del aprecio que él debe de demostrarle a la mujer que escogió como pareja. El hombre que maltrata tiene poca tolerancia a la frustración, y se cree que tiene la razón de la vida personal y de los demás, eso necesita un tratamiento largo y constituido, pues esa situación es circular y se repetirá muchas veces en donde se crea un círculo vicioso de golpear y pedir perdón... Los golpes matan poco a poco el amor, y el respeto ya se rompió con el primer maltrato; si usted no es feliz, tome una decisión pronto, no le puedo decir que arregle esto ya que si él la golpea su vida peligra. Busque ayuda para usted y no permita bajo ninguna situación que vuelva a suceder. Y la traición tampoco es sinónimo de madurez, sino de conceptos evidentemente confusos sobre la relación de pareja. Si no está a gusto, le pido como profesional de la salud que escoja la vida como camino, y que por duro que este sea, entienda que el maltrato y la traición matan pasiones y llevan al sufrimiento permanente, no acepte esto de ninguna manera. La única posibilidad para él es el tratamiento. Suerte, y la felicidad está en usted y en saber escogerla a tiempo. Decida pronto.
Paquita Brito Clavijo, psicóloga y terapeuta.
Telfs.: 252-3261, 099-928-0444.
