Hija huyó de casa

01 de Enero de 2017

Mi hija de 15 años se fue de casa con el enamorado hace dos semanas. Puse la denuncia, y después de mucho insistir con la familia del muchacho, la fueron a dejar a la Dinapen tres días después. Desde entonces ella vive con un familiar, no quiere verme, ya que asegura que no le presté atención, que la he dejado sola. No es así, he estado siempre ahí.

Todo empezó hace 2 meses, cuando me hice de compromiso. Todo estaba bien en casa, ella se llevaba bien con mi actual pareja. En cambio, el muchacho con el que anda no es nada bueno, tiene antecedentes de conducta negativa y sus compañeros me han dicho que la golpea.

No sé qué hacer, cada vez que me quiero acercar, ella me rechaza y defiende a ese muchacho a capa y espada. Las amigas del colegio me han comentado que en Facebook ha puesto que está embarazada y que ama a su nueva familia. Pero el día en que llegó a la Dinapen se le hizo la prueba de embarazo, y fue negativa.

Estoy desesperada, no sé cómo tratarla o actuar ante esto. Es mi hija y la amo.

Susy,
Guayaquil

Por la forma de presentar el caso, es notorio que la comunicación con su hija adolescente es muy deficiente. Aunque no me explica con precisión qué pasó con el padre de la joven, es obvio que ella no está de acuerdo con su nueva relación, aunque usted no lo había interpretado de esa manera. Es posible que ella solo lo haya visto como una persona cercana, pero al casarse usted con él, eso decepcionó a su hija y dejó de fingir que estaba de acuerdo con usted. Y quiso demostrarle su inconformidad con su huida de casa.

Muchos padres separados, divorciados o viudos, al rehacer su vida con una nueva pareja, olvidan que están dando un ejemplo a sus hijos, si los tienen, y que estos, habituados o sostenidos emocionalmente por determinados hábitos de rutina familiar, son desestabilizados por el ingreso de una nueva persona al ámbito familiar. Esta inestabilidad es desatendida cuando los padres asumen que los hijos aceptan sin problemas a su potencial pareja, porque la conocen y por tanto la pueden querer o apreciar como lo hacen ellos (indiferencia paternal, involuntaria).

Como adolescente, ella siente que perdió la seguridad y apoyo que provenía de usted, como su principal y única figura paterna al casarse, y por ende, piensa que ahora usted se dedicará más a su actual pareja que a ella.

En ese sentido, la pareja que ella ha conseguido para sí misma, además de representarle más atención y afecto, es una fuente de seguridad, independientemente de que esta persona sea o no adecuada para ella.

Si además, como usted comenta, él la maltrata y a pesar de ello ella lo prefiere, estamos frente a un caso de abuso emocional y psicológico, el cual ella interpreta como amor, lo que podría explicarse desde una personalidad que se ha formado dentro de un ambiente de violencia intrafamiliar. Es decir, el que pueda haber presenciado peleas entre los padres, físicas y/o verbales, indiferencia, abandono, abuso emocional entre los padres y hacia los hijos, poco o deficiente cuidado o satisfacción de necesidades básicas de parte de los progenitores, entre otros factores de violencia intrafamiliar.

La situación es muy compleja, en tanto usted no está en contacto con la niña, por lo que le recomendaría hablar con las personas que la están cuidando, para que la ayuden a explicarle que sería bueno para ella el que permitiera que se consiga orientación profesional, para manejar de manera más constructiva este problema por el que está atravesando. O también puede elegir conversar con una persona de confianza, de preferencia una persona mayor, puede ser un familiar cercano, un sacerdote u otro guía espiritual, que la ayuden a reflexionar sobre la elección de las mejores soluciones para su situación actual, como pasos iniciales a un tratamiento más completo e integral.

Pero como consejo general para usted, le diré que no tenga temor, recuerde que ella es su hija, aunque no se esté entendiendo muy bien con ella en estos momentos, su crisis es una búsqueda de seguridad y de su propia identidad. Por tanto, no desista en su intención de ayudarla. Pues no son las elecciones de ella (novio) las que le hacen decidir una u otra cosa, son sus inseguridades. Recuerde que ella la necesita, pero de una manera diferente, porque está creciendo, y en esa medida, es libre de no gustar de las personas que usted elige, pero deberá aceptarlas, por respeto a usted.

Finalmente, busque orientación profesional para usted también, apenas pueda, para manejar esta situación con su hija y con sus otros hijos si los tuviese.

Le deseo mucha suerte con su problema. (F)

Dra. Glenda Pinto Guevara,
Psicóloga clínica, especialista TREC (Parejas, Familia, Niños, Adolescentes y Adicciones).
Telfs.: 232-4066, 099-961-2322.

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