Hijo se relaciona poco

08 de Enero de 2012

Tengo un hijo de 21 años que a duras penas se graduó de bachiller. Tiene grandes problemas para relacionarse con otras personas, por lo que cada actividad que inicia por lo general la abandona: estudios, trabajos, entre otras.

Sufre de mucha inseguridad y él indica que la causa es una sudoración y enfriamiento excesivo de las manos, y teme que las personas con las que intenta relacionarse se den cuenta de ello y siente vergüenza. Esto lo enfurece y lo pone de mal humor y luego lo deprime y comienza a manifestar que no sirve para nada.

La última vez me dijo que hasta era maricón (perdonen el término) porque no tenía valor ni siquiera para quitarse la vida. Como comprenderán esto me preocupó muchísimo y busqué un especialista para que lo tratara. Este me dijo luego de hablar con él, que podría tener un problema hormonal, por eso de la sudoración excesiva de las manos. ¿Esto puede ser así?, ¿La sudoración en las manos es como consecuencia de un problema mental o lo contrario?
Walter,
Guayaquil

 

Creo que el problema de su hijo de 21 años que usted menciona merece atención urgente, pues ya ha indicado el deseo de eliminarse, pero sintiendo que no tiene valor ni para eso. Nos indica que se graduó de bachiller, pero no ha seguido estudios superiores ni ha sido constante en el trabajo.

Los síntomas que manifiesta son de una depresión ansiosa, con una gran pérdida de su autoestima (no tiene valor ni para quitarse la vida), por lo que es muy peligroso comenzar el tratamiento con antidepresivos, sin haber iniciado una psicoterapia, pues el primer efecto puede ser que ya sea capaz de quitarse la vida y se va a suicidar. Obviamente en su comunicación, muy escueta, no se pueden conocer detalles importantísimos de su vida: no se menciona a su madre, a sus hermanos o a otros miembros de la familia, tampoco se habla de su enamorada (real o imaginaria) o de alguna compañera afectiva.

Se lo describe como un solitario fracasado, que ni siquiera tiene el valor de quitarse la vida. Este es un caso que amerita su ingreso a un servicio de psiquiatría en un hospital general, con médicos que lo diagnostiquen en sus diversas funciones, psicólogo que le escuche en sus quejas y carencias y trabajadora social que analice la situación familiar en que vive, para que pueda rehacer su vida, aclarar sus valores, decidir su carrera y entender que es tan joven (21 años), que no puede considerarse un fracasado que no tiene más camino que matarse, sino que debe analizar su vida y escoger adecuadamente las dos cosas que dan un camino aceptable y feliz a un hombre: acertar en la elección de su carrera y en la elección de su pareja. Pero, insisto: hay señales que indican que es urgente ayudar eficaz y correctamente a su hijo.
Dr. Rodolfo Rodríguez Castelo,
neuropsiquiatra y sexólogo clínico. Telf.: 256-8100.

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