Parásitos emocionales

13 de Abril de 2014

Quisiera saber un poco más de los “parásitos emocionales”. Al parecer estoy pasando por una situación similar con un amigo que me confía todas sus tristezas y malos momentos para que yo lo reconforte moralmente. Sin embargo, cuando le va bien ni se acuerda de que existo. No es una mala persona, pero la verdad me gustaría terminar con esta situación. No sé cómo hacerlo. Necesito un consejo.

Rossana,
Daule, Guayas

El parásito es un vegetal o animal que vive a costa de otro (organismo) de distinta especie, alimentándose de las sustancias que este elabora y perjudicándole. El parásito vive a expensas de la otra especie. Relacionando la definición de parásitos con los “parásitos emocionales” o “vampiros psíquicos”, son aquellos sujetos que restan energía a los demás con sus patrones de pensamiento y comportamiento, agotando y debilitando mental y emocionalmente al confidente. Son el tipo de sujetos que, deliberadamente o no, trasladan su sistema emocional al otro, restándole sus reservas (alimentándose de su energía). Existen relaciones amorosas, familiares o de amistad que desgastan o anulan emocionalmente, quedando la persona atrapada en ese sistema insano. Existen dos tipos de “parásitos emocionales”: los agresivos (con sus atractivos, liderazgo, demandas devastadoras y exigencias, van absorbiendo) y los dependientes (necesidad de constante consuelo, sentimientos de tristeza y abatimiento). Si está pasando por una situación similar, entonces, analice y reflexione lo siguiente: 1) El “vampiro emocional” transmite sus estados emocionales, desarrollando desequilibrio emocional en los demás. 2) Nuestras propias necesidades se quedan relegadas a un segundo plano por atender las necesidades del “vampiro emocional”. 3) A veces, el “vampiro emocional” no es consciente de que transfiere un sistema de vida emocional que desgasta al otro. 4) Demandan constantemente que se cubran sus necesidades, caprichos y atención. 5) Generan sentimientos de incapacidad y culpabilidad por sus peticiones al otro.

Una vez que usted tome conciencia de estar cerca de una persona con las características antes mencionadas, le sugiero hacer lo siguiente: 1) hágale notar su comportamiento demandante. 2) escoja qué demandas atender y cuáles no, sin tener sentimientos de culpa. 3) desarrolle la capacidad para decir no. Decir no cuando se lo considere, a través de la capacidad de ser asertivo (estrategia comunicativa que se ubica en medio de dos conductas opuestas como son la pasividad y la agresividad). 4) desarrolle predisposición mental para llenarse de positivismo y salud mental. 5) comparta con personas que generen pensamientos y comportamientos positivos.

Msc. Silvia Cordero Encalada,
Psicóloga clínica.
Telf.: 098-868-5690.

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