Se aferra al hogar
La madre de mi hija se fue del hogar con un aparecido que conoció a través de las redes sociales, ya que según ella no ganaba lo suficiente para los gastos y ahí conoció a esta persona que le ofreció ayuda económica. ¿Qué tanto le puede afectar esta separación a la niña? Ella le ha dicho a la mamá que ella quiere estar con mamá y papá. No quiero perder mi hogar, me aferro a una segunda oportunidad.
Felipe,
Guayaquil
Apreciado Felipe, gracias por consultarnos, aunque no nos informa sobre la edad de la niña ni hace cuánto tiempo se marchó su esposa, ni el tiempo que permanecieron juntos. No sabemos si han existido separaciones anteriores ni cómo ha sido su convivir diario.
Denotamos que usted y su hija se encuentran sufriendo significativamente. Un hogar es un entorno donde existen afectos de calidad, comunicación apropiada, camaradería, perdurabilidad y percepción de bienestar. No es simplemente un ámbito de residencia.
Cada uno de los integrantes ocupa papeles o roles determinados: padre, madre, hija, hijo, hermano, hermana, y tiene derechos que deben disfrutar previamente al cumplimiento de deberes, generándose así una cultura de vida basada en valores y principios como cariño, amor, empatía, veracidad, tolerancia, continuidad, lealtad.
Tal como plantea, su excompañera no toleraba el nivel de necesidades o carencias que existían por tener usted una economía modesta, lo que originó una frustración importante en ella. Se expuso a sí misma cuando decidió transitar por las diferentes redes sociales, procurando encontrar cierto tipo de compensación o consuelo, conociendo al sujeto que la persuadió a convivir con él, estableciéndose así el abandono expresado.
Como usted ha notado, la mamá de su hija incumplió su rol de cónyuge y también falló en su papel de madre, perdió sus derechos al incumplir sus deberes. Lastimosamente, el principal referente femenino de su niña es su ex, siendo completamente natural el hecho de que la menor ansíe vivir dentro de un ‘hogar’ conformado por papá, mamá e hija.
Pero tal parece que su ex no reúne determinados requerimientos que son esenciales para darse una segunda oportunidad: arrepentimiento de los errores cometidos, deseos de integrarse conyugalmente a usted y abandonar a terceras o cuartas personas, comprometerse a contribuir con sus mejores esfuerzos al desarrollo de una familia en donde exista armonía, concordia y amor con perdón. Toda unión formal requiere del esfuerzo de los dos integrantes, así como perdonarse mutuamente cuando han existido ofensas, y requiere de un pacto de integridad por medio del cual se comprometan a desempeñar sus roles (sustentados en valores y principios) dentro de su vida interior y de pareja, así como de padres esforzados y afectuosos, lo cual requiere de un proceso previo al retorno de la pareja y de un proceso de convivencia.
Es la única forma de constituir un hogar equilibrado que mantenga a sus integrantes satisfechos y unidos con compromiso, voluntad y amor. Recomendamos la participación terapéutica de un especialista de suficiencia y ética comprobadas. ¡Mucho éxito, Felipe!
Dr. Eduardo Santillán,
Ph.D., neuropsiquiatra, psicopatólogo clínico, neuropsicólogo, psicólogo clínico. especialista en psicoterapia aplicada a individuos, parejas y familias. Telf.: 098-017-5745, dr.eduardo_santillan@hotmail.es.