Sin fantasmas del pasado
Tengo 60 años. En mi juventud me uní con un hombre casado 23 años mayor a mí. De esta relación tuve dos hijos. Mi vínculo fue muy tormentoso, me humillaba y me negaba toda posibilidad de diálogo, hasta que lo terminé al cabo de 20 años. Pero no aprendí la lección y nuevamente me involucré con un hombre menor a mí con 8 años.
También terminó mal. Actualmente tengo una relación con una persona sin vínculos, es tierno, me valora y dice me ama. Hemos intentado unirnos pero no salió bien debido a mis temores e inseguridades que no me permiten integrarme totalmente a la pareja. Siento que deseo unirme a él, me hace falta y lo amo. Quiero ayuda para poder vivir esta relación sin fantasmas del pasado y con la persona indicada.
Piluncha,
Guayaquil.
Primero que nada amiga no seamos tan duros con nosotros mismos, pues la vida lo que quiere es enseñarnos a través de las personas con las que tenemos que compartir nuestro tiempo, y toda vivencia no será solo “color de rosas”, como el proverbio lo dice. Siempre hay que trabajar para armonizar las partes difíciles de las relaciones de convivencia, por más dolorosas que sean, ya que las personas que nos rodean no siempre van a ser agradables en su influencia.
De todas maneras hay algo de provecho que podemos obtener de nuestras diferencias: y eso es un mayor entendimiento del amor y el conflicto en la naturaleza humana. Hay que acordarse que muchas veces nos perdemos en las experiencias con las demás personas, buscando esa legendaria media naranja; y nos olvidamos que nuestro “Yo” demanda el mismo esfuerzo para ser feliz. Pero todo temor e inseguridad deben ser tratados en el consultorio cuando se vuelven inmanejables, para poder emerger de nuestras dificultades y experimentar mejor la vida.
Los recuerdos del pasado cuando son difíciles, interfieren negativamente en nuestro diario vivir, no nos darán respiro, porque aflorarán en el tren del pensamiento diario, y se necesita la terapia adecuada para poder eliminarlos.
“Los procesos vitales necesitan en las fluctuaciones y cambios de la dinámica social, una necesaria estabilidad emocional para lograr en la vida el éxito”
Balbina Salazar de Thoret,
psicóloga clínica. Telf.: 234-5687.