Curaciones caseras

En la actualidad se siguen practicando algunos procedimientos curativos ancestrales.

Existen métodos caseros que en nuestro medio, aunque no tengan argumentos científicos, se ven validados por la fe popular y que producen de una u otra forma efectos terapéuticos. Aquí, algunos de ellos:

• Pasar el huevo sobre la superficie corporal para extraer las energías negativas que aparentemente fueron causadas por el mal de ojo y que producen en los afectados alteraciones gastrointestinales.
• Fajar al recién nacido con pañales o telas para evitar que se produzcan deformaciones esqueléticas durante su crecimiento.
• Pasar el rabo del gato para curar los orzuelos.
• Amarrar en la cabeza con un pañuelo una hoja de almendro, para combatir el dolor. En apariencia, la presión que ejerce el pañuelo sobre las regiones temporales tendrían el mismo efecto que la digitopuntura.
• Pasar el sapo sobre la superficie corporal afectada por erisipela, la temperatura fría del anfibio absorbe la calentura de la piel.
• Utilizar la membrana interna –“la telita”– de la cáscara de huevo para las quemaduras y heridas superficiales de la piel. Al parecer, su alto contenido proteico permite la granulación de la parte afectada.
• Aplicar un pedacito de papel mojado con saliva en la frente del afectado para quitar el hipo.
• Anudar un cordón rojo en la muñeca de los niños para evitar el mal de ojo.
• Dar de beber agua de papa cruda para “aflojar” la lengua en los niños que pasados el año de edad aún no hablan.
• Ingerir el caldo de cabeza de bagre para mejorar la inteligencia y el caldo de los genitales del toro para aumentar la virilidad. Probablemente, en el primer caso, las proteínas derivadas del marisco estimulen las conexiones interneurales; y, en el segundo, el eventual contenido hormonal de los genitales incentiven la potencia sexual.

Plantas Medicinales
Hay más de 300 plantas medicinales conocidas en el país. Aquí las más conocidas:

Sábila: Actúa como desinflamatorio local y antibiótico natural, además es un complemento nutricional.

Papa rallada: El sumo se lo utiliza para tratar la gastritis.

Lenteja: Remojada en agua, el líquido alivia la comezón de la piel como en el sarampión y varicela.

Hoja de aire: La infusión en gárgaras sirve para aliviar la irritación de la garganta.

Chaya: Mejora la circulación y regula la presión arterial.

Pelusa de choclo: Actúa como diurético, eliminando el exceso de agua en el cuerpo.

Rábano: En combinación con la miel de abeja ayuda al tratamiento de las afecciones respiratorias.

Manzanilla: Actúa como digestivo y aplicada localmente con compresas, desinflama.

Fuente: Dr. Gustavo Cáceres Castro, médico cirujano.
Teléfono: 223-1103.