Pisada correcta
Los dolores en los pies al caminar, cuando están enfermos o tienen alteraciones, se pueden aliviar con el uso de plantillas más precisas.
Si su pisada es correcta al caminar es porque cumple tres fases fundamentales: empieza con la de impacto en la que el pie se apoya en el talón; sigue con la de apoyo, donde la planta del pie está en contacto con el suelo; y termina con la de impulsión, que es cuando el dedo gordo provoca el desplazamiento.
Esos movimientos no se los puede ver porque los hacemos todos los días rutinariamente cuando caminamos. Pero lo que sí es posible observar son los tacos desgastados de los zapatos cuando los pies padecen alguna enfermedad o alteración.
Según el traumatólogo Arturo Maya Montero, las personas que tienen pie plano (sin puente), por ejemplo, no solo desgastan la parte medial o interna del tacón, sino la zona del dedo gordo, incluso la punta del zapato. Mientras que las de pie cavo (arco elevado) lo gastan en la parte externa.
El uso constante de zapatos inadecuados, en punta o tacones, sobre todo en las mujeres, también va alterando la forma y estructura normal de los pies, más que nada en el antepié. Asimismo, sucede con las malas posiciones de estos dentro del calzado o por caminar sobre un piso irregular.
El sobrepeso o las deformidades de los pies, agrega, pueden alterar el tipo de marcha, provocando dolor no solo en la columna vertebral, sino en las rodillas, caderas y tobillos.
Para el médico fisiatra Gustavo Bocca Peralta eso sucede porque somos un solo cuerpo o eje cinético, y cualquier alteración en la marcha incide en otras articulaciones. Como ocurre, por ejemplo, en pacientes con artritis reumatoidea, que a causa de sus deformaciones en los pies sufren a futuro de dolor crónico en las áreas impactadas o desarrolla una artrosis en otro nivel.
Uso de plantillas
Las plantillas, dice Maya, se usan únicamente cuando el pie está enfermo o alterado. En pie plano, por ejemplo, sirven para mejorar la posición del pie porque los arcos están caídos o modificados en su forma externa: en el antepié o retropié. También se las sugiere en caso de sufrir de fascitis plantar (inflamación del tejido grueso en la planta o parte inferior del pie) o espolón calcáneo (calcificación en el hueso del talón), para relajar toda la fascia plantar y evitar que duela también el talón.
Dependiendo de la patología que tiene el paciente en los pies se asigna el tipo de plantillas con las respectivas medidas. Puede usar alza (aumento de capa) en el retropié, en el tacón interno, externo o en el arco longitudinal medial. O cuñas pronadoras en la parte externa del antepié, dependiendo de lo que se necesita en pie plano, cavo o en fascitis plantar.
Sin embargo, agrega, si los problemas ya están estructurados la mejor solución es hacer las correcciones con cirugía, porque las plantillas solo van a ayudar a tener un mejor descanso del pie, una mejor posición o evitar el dolor durante la marcha.
Estudios especiales
Aparte de la radiografía con las que, según Maya, se pueden detectar las alteraciones de los pies, también se lo hace mediante plantoscopios. Son aparatos con luces que permiten ver exactamente la pisada u observar la deformidad.
También, dice Bocca, se puede realizar otro examen con un baropodómetro digital. Posee un escáner preparado para medir las presiones de los pies. La muestra se la toma con el paciente caminando, a quien se le ponen unos sensores en los zapatos. Las impresiones se observan en una pantalla de un computador y el especialista hace los cálculos de las presiones de la pisada para estimar en qué lugar o sitio del pie están más acentuadas.
Este examen dura 15 minutos, es preciso en un 95%. Los resultados sirven para la creación de una plantilla de fibra de carbono personalizada. Ni siquiera el pie derecho tiene la misma impresión que la del izquierdo. Pueden ser totales o parciales.
Medida de zapatos
Debe sobrar medio centímetro entre el dedo más largo y la puntera. Si queda grande se pueden producir desplazamientos que provoquen problemas de uñas o falta de estabilidad e impulsión, según www.runners.es.
Tipos de pisada
Pronación es cuando la planta del pie se apoya en el suelo y se ‘hunde’ hacia adentro. La supinación es la reacción contraria, ‘hundimiento’ hacia el exterior, y la pisada neutra es en la que no se produce ningún hundimiento del pie.
Plantillas o arcos del pie
Se colocan dentro de los zapatos para dar soporte y alinear el pie y las extremidades inferiores. Así se previene el avance de una deformidad, además mejora la función del pie y disminuye o elimina el dolor que esta causa.