‘Manabí es todo’
En plena temporada vacacional, la mayor provincia costera ha lanzado una campaña de promoción que resalta su diversidad de atractivos.
La provincia de Manabí busca convencer al viajero ecuatoriano y extranjero de que en sus 18.506 km² de superficie reúne bosques, mar, montañas, fauna, flora, cultura, arqueología, artesanías, gastronomía, tradiciones, hotelería, y sigue la lista.
“Manabí es todo”, campaña impulsada por la Prefectura local, promueve su condición de multidestino con una ubicación geográfica, condiciones topográficas, relieve y clima que favorecen a este territorio, por ejemplo, para contar con una producción importante en maíz, plátano barraganete, cítricos y cacao. “En pesca, tenemos la mayor flota pesquera artesanal e industrial del país. Elaboramos gran cantidad de dulces. Aquí se registran asentamientos de culturas prehispánicas, lo que nos da una rica historia cultural”, señala la campaña.
Manabí también tiene una cordillera costera con 350 km de playa, además de montañas, cascadas y ríos “en hermosos paisajes y lugares perfectos para la recreación y aventura”.
Y la lista de tesoros continúa, la mayoría de los cuales están reunidos en estos cuatro circuitos turísticos que son también parte de la promoción. Estas rutas fueron elaboradas por el Ministerio de Turismo, la Prefectura y los municipios involucrados.
Ruta de la Paja Toquilla
El sombrero más tradicional
El “tejido tradicional del sombrero de paja toquilla ecuatoriano” es, desde el 5 de diciembre del 2012, Patrimonio de la Humanidad (Unesco), por lo que este paseo manabita representa un acercamiento a la más pura tradición de los artesanos dedicados al digno oficio de tejer estos accesorios tan apreciados dentro y fuera del país.
La comunidad de Pile, del cantón Montecristi, aloja el 22% del total de los artesanos de la provincia, entre los cuales el 36% son tejedores de paja toquilla. Pero el punto más relevante es que el 86% de los tejedores de sombreros finos de Manabí se encuentran en este pequeño pueblo lleno de cultura.
La cabecera cantonal de Montecristi, cuna de Eloy Alfaro, se localiza en las faldas del cerro Montecristi. Esta zona también es conocida por la elaboración de artesanías de mimbre, piquigua (tipo de bejuco), plástico y madera. Otras localidades ubicadas a lo largo de este circuito perteneciente a este cantón son Caña y La Pila.
El cercano puerto de Manta, que siempre luce atractivo, y Jipijapa, cantón que defiende su posición como un pionero en la elaboración de los sombreros de este tipo, son también parte de la ruta, mientras que la naturaleza se disfruta mejor en el bosque húmedo de Pacoche (cantón Manta). Una visita a esa reserva invita a encontrarse con los monos aulladores.
Ruta del Colibrí
El pequeño vuelo del color
Este circuito nace en el cantón Puerto López, con 12 kilómetros de extensión desde el bosque protector de Ayampe para luego atravesar el recinto Quebrada Honda y desde allí ingresar al interior del Parque Nacional Machalilla. Luego sigue por el recinto Guale hasta la comuna El Pital.
Este recorrido permite conocer la variada flora y fauna en este bosque protector, con especies únicas como el colibrí denominado Estrellita Esmeraldeña, considerada la segunda ave más pequeña en el mundo.
Ayampe, a 15 km del Parque Nacional Machalilla, está abrazado por manglares que son hogar de más especies de aves.
La cordillera de Chongón-Colonche es la única fuente de agua dulce en la zona y contiene una biodiversidad impresionante. La importancia de la zona del Río Ayampe ha sido señalada por Birdlife International, que ha incluido esta área como Área Importante de Aves para Ecuador, designación que llega hasta el Parque Nacional Machalilla.
La Reserva Río Ayampe, propiedad de la Fundación Jocotoco, fue creada para proteger al colibrí Estrellita Esmeraldeña (Chaetocercus berlepschi), el cual se encuentra en peligro crítico.
La Reserva Río Ayampe se encuentra cerca de las comunas Las Tunas y Puerto Rico.
Ruta del Cacao
Paseo con aroma típico
La actividad campestre de Manabí se exhibe a través de esta propuesta que invita a los visitantes a llegar a Portoviejo para conocer el Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (Iniap), entidad científica gubernamental creada para desarrollar plantas de cacao fino de aroma con semillas tecnificadas para los productores del país.
En el Iniap, el turista accede a los viveros de cacao y aprende sobre los tipos de reproducción, la polinización, la germinación del cacao, técnicas de injerto y los diversos tipos de cacao fino y de aroma que se obtienen.
También en Portoviejo, la finca demostrativa Don Anastacio abre sus espacios para mostrar el correcto manejo orgánico de la planta en todas sus etapas hasta la cosecha del cacao.
En Calceta, la Corporación Fortaleza del Valle reúne a 950 socios que producen frutos que nutren las exportaciones del país. Los visitantes pueden recorrer sembríos y disfrutar de un almuerzo típico en una finca ecológica, que incluye un postre de chocolate artesanal. Los atractivos complementarios son Rocafuerte, poblado famoso por sus dulces, y Sosote, con sus artesanías en tagua. Y en todos esos sitios siempre será posible comer un rico desayuno manabita con sal prieta y maduro.
Ruta del Café
Con el olor de la mañana
La zona sur de Manabí se caracteriza por su producción de café, teniendo como eje de tal actividad el cantón Jipijapa.
El mayor atractivo de este cantón, conocido como la Sultana del Café, es su encanto natural e histórico, escondido tras sus montañas altas y bajas, a las que en tiempos prehispánicos llegaron los mayas dejando un legado cultural que se mantiene hasta la actualidad.
La primera fase de este circuito involucra la vía de 9 kilómetros desde Chade hasta Naranjal y Pisloy, camino en el cual se busca unir a las fincas productoras para motivar una mayor oferta turística.
Actualmente ya operan fincas con una oferta agroturística, además de que se observa la presencia de artesanos en fibras vegetales y otros materiales.
Puerto Cayo es una hermosa playa que se caracteriza por su arena blanca y mar azul. Joa es un recinto a 6 km de Jipijapa con pozos de aguas azufradas que son empleadas por turistas y habitantes para curar enfermedades como salpullido y reumatismo, entre otras.
Los pozos de agua azufrada provienen de vertientes volcánicas del Chocotete, volcán inactivo al noreste del recinto. Se dice que los pozos de Choconchá, ubicados en el sitio del mismo nombre, en la carretera de Jipijapa, son el testimonio del paso de los mayas por esta zona. En el corazón de Jipijapa se asientan la iglesia de San Lorenzo y el parque Simón Bolívar, con su glorieta y la plazoleta de la Libertad. (M.P.) (I)