El Ecuador mostrado cabeza abajo

Desde la Berlinale, el gran festival de cine en Alemania, el estreno de Feriado, del realizador ecuatoriano Diego Araujo.

La película de Diego Araujo empieza con el carnaval que resulta la antesala del 8 de marzo, el feriado bancario. Luego de ser estrenada en la Berlinale, este reportaje propone una antesala al estreno de Feriado en Ecuador.

Quince años han pasado desde que el feriado bancario tumbó a Ecuador. Y es ahora, en este tiempo de jubileo de aquella trágica crisis económica, en la que la producción de Diego Araujo y Luna Films –Feriado– celebró su estreno mundial, programado dentro del importantísimo Festival de Cine de Berlín –Berlinale– tomó lugar en febrero.

En la preponderante Casa de las Culturas del Mundo de la capital alemana (Haus der Kulturen der Welt) se estrenó Feriado, así como las demás películas internacionales que participaron dentro de la categoría Generation14plus, dedicada a películas sobre y para jóvenes. La Casa de las Culturas del Mundo, situada cerca del Reichstag y el Parlamento alemán, es en su arquitectura, un espejo de las contingencias políticas a nivel internacional. Que Feriado se haya estrenado justamente aquí, es de una fuerza metafórica (la relevancia histórica que aporta la película de Araujo); sin embargo separa, con discreción, a los filmes internacionales mostrados en Generation 14plus del género central de la Berlinale, aislando nuevamente bajo el rubro “exótico” y la mirada etnológica europea.

El domingo 16 de febrero, último día del Berlinale, fue un día peculiarmente hermoso en la capital; el sol brillaba –algo curioso para un día de invierno de la gris Berlín– y el ocaso resultó cursi desde la ventana del cine Cubix en la Plaza de Alexander, donde Diego Araujo y su staff respondieron las preguntas del público. Ese domingo fue la tercera y última función de Feriado; las tres funciones estuvieron agotadas. Sala llena. Aplausos largos al final.

Mirada hacia adentro

Las preguntas que el público formuló resultaron tanto técnicas, objetivas como personales; tales como: ¿Qué escenas fueron las más difíciles de rodar? ¿cómo puede ser que en el cine ecuatoriano aún no se han tocado temas de la homosexualidad? ¿Es cierto que los bancos cerraron tanto tiempo? ¿En qué lugares se ha filmado Feriado?

A estas preguntas recurrentes hay respuestas: Araujo afirma que la homosexualidad es un tema tabú en el Ecuador y que con la sutileza escogida, quisiera que la película abriese foros de discusión en épocas sobre debates acerca del matrimonio igualitario.

A su vez, Araujo sabe que el feriado bancario de 1999 es un tema sensible para el país entero; que consumió hasta su pobreza a la clase media y baja; que ello causó una ola de migración enorme. Tematizar la crisis tan solo con el título –Feriado escolar y bancario– paraleliza dos momentos cruciales: el íntimo (el protagonista despierta hacia su inclinación sexual hacia los hombres) y el colectivo (el despertar del país a una nueva realidad social).

Es para esperarse: los ecuatorianos viviendo en Europa que vieron la película se sienten abrumados con la fórmula de Araujo: vistas panorámicas alrededor de Ibarra, de Mindo, de Quito nocturna cabeza abajo (evento clave de la sinopsis). Este romanticismo tropical lleva también a portales como Viventura Tours a hacer entrevistas que se interesan básicamente en describir los paisajes (otra vez, el exotismo de costumbre). Y con estos panoramas viene empaquetado el retrato eterno de las estructuras sociales del Ecuador, el racismo, los estereotipos de las clases sociales, la música, el trago, las expresiones, los actores (una niña de 12 años reconoció en el estreno de Feriado a todos los actores de ‘EnchufeTV’).

Las propuestas mostradas dentro de Generation 14plus están relacionadas con un tema panorámico: el Coming of Age, un proceso de maduración, el despertar de la conciencia. Las temáticas, los estilos y las estructuras son muy distintas. Araujo dice encontrar puntos de conexión entre Feriado y 52 Tuesdays, de Sophie Hyde (Australia, 2013) o Atlántida, de Inés María Barrionuevo (Argentina, 2013). Araujo manifiesta, en todo caso, que no escribió Feriado pensando en una película para jóvenes, sino más bien para un público contemporáneo a él, alegando que la perspectiva con la que ha producido es una específica.

El guion de Feriado parte de un cuento de un par de páginas sin siquiera un título. Este cuento se desplaza entre los dos personajes polarizantes Juan Pablo y Juan Pablo. Uno está en una fiesta de carnaval, mientras el otro está robando las tapas de llantas de los invitados, y en un punto crítico, se encuentran. El cuento, escrito en primera persona, es de un despertar a una conciencia social en una noche corta. Feriado fue desarrollándose dentro de un seminario en la filial del Instituto Sundance de Guajaca, México. Es ahí donde con Hanne-Lovise Skartveit (esposa de Araujo y coproductora del filme) empiezan a moldear el guion durante foros de coproducción, así como festivales de cine en Huelva (España) y Valdivia (Chile). Araujo y Skartveit consiguieron un productor (Abacafilms Production) a raíz de las relaciones hechas en estos lugares y es en el 2012 donde ganan el premio de cine de Tribeca en Nueva York, algo que les permitió completar el desarrollo de la película.

Mirada desde afuera

La idea es, según Araujo, contar esta historia de un mundo idílico de amor de feriado, pero en un marco más duro, en un ambiente adulto, corrupto y amenazador. Este ambiente, asegura el director de Feriado, es la dinámica social que ha definido a Latinoamérica. Pero no se trata de un romance usual, no es el plot de Grease (Vaselina, 1978) con Olivia Newton John y John Travolta en donde las figuras son héroes juveniles de verano completamente idealizados. Es esta búsqueda de identidad sexual en realidad la que define el comienzo y el final de este largometraje.

Ian Weissberg, de la revista londinense Variety, hace una crítica contundente que explicaría por qué Feriado no alarmó a la audiencia ni generó polémicas dentro de la Berlinale: “A pesar de que Feriado es apenas original, lo que funciona realmente en ella es su tonalidad de clásico romance juvenil; simple y gentil, nada pretencioso. El resto simplemente le otorga un tanto de color, pero sin alcanzar verdadera profundidad. Araujo es parcialmente exitoso construyendo paralelismos entre el despertar de conciencia de Juan Pablo durante su feriado y el feriado bancario; mientras los pedazos de noticias parecen un gancho forzado”. Weissberg agrega a esto, que “lo que realmente resulta estimulante son los silencios observares de Juan Pablo, con la destreza de Juan Pablo Arregui en su rol, demostrando una mezcla de timidez y curiosidad que dice tanto de vulnerabilidad como del deseo; una inocente sensualidad”.

Para Weissberg, hay también escenas dominadas por la banda sonora. Esta, compuesta por Daniele Luppi, quien trabaja en Los Ángeles con músicos como Jack White y Norah Jones, está programada para ser lanzada bajo el sello del célebre músico experimental Mike Patton. La banda sonora, un tanto ecléctica, abarca sobre todo temas del Black Metal, que le dará también una tonalidad a la relación entre Juan Pablo (Juampi) y Juan Pablo (Juano).

Mirada hacia atrás

El tema que Juano le enseña a Juampi, Moment of Clarity, es de la banda Satiricon, de Bergen (Noruega), cuna del Black Metal y que a su vez es parte del álbum Rebel Extravaganza, también de 1999. El Black Metal es una estética específica, con notas de angustia adolescente en las letras, los instrumentos. No es un género depurado, los comienzos solo son demos; y “sin ser un experto”, dice Araujo, “pudiese decir que el metal de hoy es un sonido más depurado”.

Los temas de la banda ecuatoriana Nagrun escogidos para la película son más recientes. Los tres temas que aparecen en esa fiesta en la casa comunal del pueblo, a la cual van los dos Juan Pablos, son de Tierra Canela (¡noventa, total!). Araujo pretende con esto hacer un comentario antropológico, a la Martin Scorsese, donde las escenas adquieren un aire contemporáneo y un peso dramático a partir de la música.

“Para mí, el 8 de Marzo de 1999 es el 11 de Septiembre del 2001 de los ecuatorianos”, manifiesta Araujo. “No me gusta la comparación pues el dolor es otro. Pero si hablas en Nueva York sobre este tema, todos tienen un amigo, una anécdota. En ese momento yo estaba sentado con mi novia de ese entonces (...). Del feriado bancario igual, todo el mundo lo relaciona con alguien y con algo”.

Feriado funciona, a pesar del vestuario, la música y los accesorios que refieren a la moda y lo actual en los noventa, con un semblante atemporal. El trabajo resulta un comentario agradable hacia los temas de sexualidad, identidad e historia que hasta ahora no se ha hecho en dichos términos.

Más información: www.facebook.com/feriadofilm