Cerámica vintage en auge
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Diseñadores célebres como Tom Dixon se han volcado a los pisos: dotan de una óptica moderna a elementos tradicionales. -
Colección Talavera, de Graiman, inspirada en la tradicional cerámica mexicana, rica en detalles y ornamentos. -
Los azulejos coloridos de Paola Navone atrapan la mirada. -
Koren, de Graiman, juega con las líneas y curvas para crear formas.
Miremos hacia abajo: los diseños abstractos, coloridos, muy elaborados o geométricos vuelven a las baldosas.
¿Por qué prestarle tanta atención y poner tanto esmero en algo que se va a pisar durante décadas?
La arquitectura definió los suelos, durante mucho tiempo, a partir de la función que cumplirían y descuidando el valor estético que tienen en la construcción. Pero así como antes la tendencia era colocar suelos discretos, hoy la tendencia se orienta hacia estos modelos: los que llevan un revestimiento brillante y los clásicos azulejos de colores al estilo mosaico marroquí.
El reconocido arquitecto alemán Marc Benjamin defiende estos diseños. “Le dan mucho encanto a esa parte de la vivienda... Dan a los pisos algo cálido y totalmente fuera de lo común”.
En la década del 20 se los utilizaba para imitar otros materiales más valiosos. Se los colocaba muchísimo, y de hecho siguen viéndose en algunas construcciones antiguas, pero en la segunda mitad del siglo pasado fueron cediendo terreno ante elementos que parecían más modernos, como la madera. Ahora la tendencia da marcha atrás.
Por ejemplo, en Ecuador, la empresa Graiman ha lanzado en esta tendencia los diseños Koren y Talavera. “La decoración vintage está en auge, por este motivo ha nacido un producto que evoca épocas pasadas y exóticas gracias a sus patrones geométricos”, comenta. (I)
líneas y líneas
Las líneas en diferentes direcciones logran un efecto geométrico, como un rompecabezas infinito. Así luce esta baldosa modelo Toscana, de Cerámicas Rialto. Los colores terra se prestan a combinar con tonos contrastantes y al mismo tiempo relajan.
de cemento
Las baldosas de cemento llevan diseños muy elaborados. A diferencia de los azulejos de cerámica, su superficie es rústica y mate. Fueron producidas y utilizadas desde finales del siglo XIX, en Francia, Península Ibérica, Italia y antiguas colonias.
