Un premio deslucido
Alfredo Bryce Echenique recibió el galardón en Lima, en silencio, casi de manera clandestina. Se trató del Premio FIL de Literatura en Lenguas Romances, que otorga cada año la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, México, a un escritor que se destaca por su trayectoria en las letras. Es un homenaje a su trabajo.
Pero Bryce Echenique, autor de una vasta obra literaria, tiene una sombra en su carrera. Hace unos cuantos años se le siguió un proceso por plagio de unos artículos periodísticos. Plagio comprobado. Y fue este aspecto el que hizo que tras conocerse la decisión de la Feria de Guadalajara de entregar el galardón al escritor peruano, se encendiera la polémica. Muchos intelectuales alzaron su voz de protesta. Pidieron a la Feria que reconsiderara la decisión, que Bryce Echenique no se merecía ese reconocimiento. Que otorgándole el premio se denigraba a la literatura y a la Feria y que de alguna manera se condonaba el plagio. El jurado esgrimió que premiaba al escritor por su trabajo literario y no por sus textos periodísticos. Pero ese argumento fue, asimismo, cuestionado.
Hubo voces que se levantaron a favor de Bryce Echenique, que defendían su premio. Y el escritor, en medio de esta controversia, afirmó: “No veo pues que deba renunciar a nada mientras el jurado que votó a favor de mi obra literaria me mantenga su plena confianza”.
El jurado, para zanjar la polémica, decidió mantenerle el premio al escritor, pero no entregárselo en el marco de la Feria, el próximo 24 de noviembre como originalmente estaba previsto, sino hacer una ceremonia privada en Lima, la capital donde reside el escritor. Este hecho ya sucedió. Bryce Echenique recibió la presea en su país, en una ceremonia íntima, sin brillo.
¿Es tan difícil asumir que tal vez no fue una buena decisión del jurado nombrar a Bryce Echenique como ganador? ¿La ceremonia en Perú fue una forma de quedar bien con los adeptos y con los detractores de Bryce Echenique? ¿El escritor hizo bien en recibir un premio en esas condiciones? ¿No hubiera sido más digno de su parte quizá desistir? ¿Un hecho puntual puede empañar toda una producción literaria? Son inquietudes que me asaltan luego de seguir esta polémica literaria. Una más de las tantas que se cocinan en el mundo de las letras.
