¡Capitana al mando!
Desde agosto, Nathaly Albán observa el mundo de forma especial como capitana del catamarán Celebrity Xploration, que navega en las islas Galápagos.
Los navegantes tienen experiencias muy diferentes a aquello que se vive en tierra firme, indica la guayaquileña Nathaly Albán. “En altamar te sientes más cerca de la naturaleza”, dice la primera ecuatoriana en haber sido nombrada capitana de un barco en el país.
El horizonte es distinto y es posible observar animales que no aparecen cerca de la costa, como el cachalote, un inmenso mamífero con forma de roca; las mantarrayas gigantes, con más de 30 metros (“son más grandes que el barco”), y hasta ha contemplado cómo el mar nocturno se enciende. “A veces el océano parece brillar. Es el plancton”.
Sueño cumplido
Nathaly Albán, de 33 años, siempre gustó de las piscinas y el océano. El agua llenaba un mundo que ella sentía familiar desde muy pequeña. “Siempre quise vestirme de uniforme blanco y navegar. Ese era mi sueño”.
Pero cuando se graduó del colegio, la Escuela de Marina Mercante Nacional (Esmena) aún no aceptaba mujeres en sus filas. Por eso, ella estudió Economía durante tres años hasta que, por fin, pudo ingresar en la segunda promoción que recibía mujeres en esa entidad. “La primera promoción solo tenía una mujer”.
Ella siempre tuvo claro que deseaba conocer el mundo a bordo de un barco, indica Nathaly, quien ya ha recorrido gran parte de los puertos de América como miembro de la Flota Petrolera Ecuatoriana (Flopec).
Pero para lograr todo ello, primero cumplió con un entrenamiento tipo militar con estrictos requisitos académicos y fuertes pruebas físicas.
Las pruebas de natación fueron las actividades más complejas antes de graduarse de la Marina Mercante a mediados del 2005. Hoy tiene el título de primer oficial de cubierta y de ingeniera en transporte marítimo y puertos, con el aval de la Universidad Metropolitana, lo cual viene sumado a sus doce años de experiencia como navegante.
En agosto fue nombrada capitana del catamarán Celebrity Xploration, que pertenece a la flota de la naviera Celebrity Cruises. “Le dije a mi familia muchas veces que algún día sería la primera mujer capitán de un barco en Galápagos, ahora esto está sucediendo”.
Sus metas son claras: tener un desempeño excelente como líder de ese catamarán, diseñado para acoger 16 pasajeros y 10 tripulantes, con miras a desempeñarse en un futuro en un barco más grande. Su ejemplo es la estadounidense Kate McCue, capitana del barco Celebrity Summit, de la misma naviera, que navega en el Caribe con capacidad para 2.000 pasajeros.
“Mi vida está en el mar”, concluye Nathaly. Y ella se siente también capitana de su destino.
Siempre quise vestirme de uniforme blanco y navegar. Ese era mi sueño (...). El océano te muestra paisajes insólitos, sobre todo en las horas de vigilancia, cuando contemplas el horizonte”.
Capitana Nathaly Albán