El futuro de Facebook
Tal vez, dentro de poco, esta red social no siga llamándose así. Sus creadores apuestan por incorporar nuevos servicios a sus usuarios. ¿Lo ha conseguido?
A dos años desde su accidentada oferta pública inicial, Facebook se ha convertido en una empresa fuerte que regularmente da a conocer resultados financieros que inquietan a los inversionistas. Pese a todas las predicciones pesimistas, por lo demás, la base de usuarios de la compañía sigue creciendo, y casi una quinta parte del tiempo que los estadounidenses dedican a sus smartphones lo pasan en Facebook. Eso supera a la cantidad de tiempo que pasamos en cualquier otro servicio por un amplio margen; y supera a casi cualquier otra cosa que hacemos en nuestros teléfonos, o en nuestras vidas, punto.
Y sin embargo, ¿cuándo fue la última vez que nos entusiasmamos con alguna nueva función en Facebook? Los dos grandes productos que Facebook dio a conocer el año pasado –Home, una pantalla bloqueada de Android, y Graph Search, un motor de búsqueda– no pegaron. Y algunas de las más innovadoras ideas de relacionamiento social recientes han provenido de empresas advenedizas, a las cuales Facebook ha comprado por enormes sumas (hasta $ 19.000 millones por WhatsApp, mil millones de dólares por Instagram) o ha tratado infructuosamente de comprar ($ 3.000 millones ofrecidos por Snapchat).
Cada vez que un nuevo y muy publicitado producto de Facebook estalla en la plataforma de lanzamiento, y cada vez que la compañía paga miles de millones de dólares por la gran idea de alguien más, empiezan a circular las predicciones del fin de Facebook. Pero Mark Zuckerberg, el cofundador y director ejecutivo de la compañía, no está preocupado. El motor de innovación de Facebook quizá se haya estancado últimamente, pero Zuckerberg ha estado trabajando en modernizar la forma en que la compañía crea y distribuye nuevos servicios. El esfuerzo, que él empezó a discutir a principios de este año, es llamado Creative Labs, y puede resumirse en una sola palabra: Aplicaciones. Muchas, muchas aplicaciones.
“Lo que estamos haciendo en Creative Labs es básicamente individualizar la gran aplicación azul”, dijo Zuckerberg en una reciente entrevista en las oficinas centrales de la empresa en Menlo Park, California.
En el pasado, dijo, Facebook era algo grande, un sitio web o aplicación móvil que te permitía satisfacer todas tus necesidades sociales en línea. Ahora, en los teléfonos móviles especialmente, Facebook empezará a separarse en muchos servicios más pequeños y más estrechamente enfocados, algunos de los cuales ni siquiera llevarán la marca de Facebook, y quizá no requieran una cuenta de Facebook para ser usados.
Aciertos y desaciertos
El plan es tan riesgoso como audaz, y alterará en gran medida la manera como en la mayoría de los más de mil millones de usuarios de Facebook experimentan el servicio. Pudiera fracasar fácilmente fastidiando a los usuarios y quizá frenando el crecimiento. Y pese a recibir críticas exultantes, la primera aplicación salida de Creative Labs –Paper, una aplicación para iPhone que permite a los usuarios navegar por el listado de Noticias de Facebook a través de un sistema de gestos táctiles– ha conseguido pocos usuarios desde que fue dado a conocer en enero.
El plan de Zuckerberg realmente no es una sorpresa. Facebook ha estado ofreciendo desde hace tiempo sus servicios en aplicaciones separadas; lanzó una aplicación de mensajes de texto independiente, Messenger, en el 2011. El nuevo plan acelerará ese esfuerzo. Para usar todas las funciones de Facebook quizá necesitemos instalar un conjunto de aplicaciones que darán prioridad cada una a solo una función, desde navegar por el listado de Noticias hasta enviar mensajes e interactuar con grupos.
Recientemente, la compañía empezó a notificar a sus usuarios que pronto requeriría que instalaran la aplicación de Messenger independiente para enviar mensajes de Facebook. Zuckerberg dijo que la estrategia de aplicaciones múltiples está destinada a adaptar a Facebook a la manera en que la gente usa los teléfonos móviles, que ahora representan el grueso de las visitas e ingresos de publicidad de Facebook. “En los móviles, hay un gran beneficio de crear experiencias de primera clase para un propósito único”, dijo.
Como hay tan poco espacio en la pantalla de un teléfono, las aplicaciones que promueven una sola función pueden tener un diseño más sencillo y más intuitivo, mejorando la manera en que funcionan. Las aplicaciones para un propósito único quizá corran más rápidamente, también; por ejemplo, Facebook ha encontrado que las personas que reciben mensajes responden 20% más rápidamente a través de Messenger que a través de la aplicación de Facebook.
Pero lo que es más prometedor de la estrategia de aplicaciones múltiples es que permite a Facebook correr riesgos creativos. “Nos verán explorando nuevas áreas para las que sentíamos que no teníamos espacio antes”, dijo Zuckerberg.
Nuevas estrategias
Para las compañías de software, uno de los peligros del éxito es ser esposadas por sus clientes; entre más usuarios se tengan, más difícil es innovar, porque la mayoría será adversa a cualquier cambio. (Microsoft ha sufrido una versión de esto). Al filtrar sus innovaciones en nuevas aplicaciones que carecen de una base de usuarios establecida, los ingenieros y diseñadores pueden dar saltos creativos que podrían no haber funcionado si simplemente hubieran sido funciones añadidas a la aplicación primaria de Facebook.
Se puede ver este razonamiento en funciones en Paper. Los desarrolladores del proyecto dijeron que se les había dado libertad para probar nuevos tipos de herramientas de programación y para dejarse llevar por nuevas ideas de diseño; lo describieron como un esfuerzo de imitar el espíritu de una empresa incipiente dentro de Facebook. El resultado es poderoso: Paper se ve y se siente no como otra aplicación de Facebook, y es un placer usarla; es uno de los productos móviles más impresionantes que cualquier compañía, grande o pequeña, haya lanzado recientemente.
Sin embargo, Creative Labs tiene sus críticos, y su éxito está lejos de estar garantizado. Ted Zoller, el director del Centro para Estudios del Emprendimiento en la Escuela de Negocios Kenan-Flagler en la Universidad de Carolina del Norte, argumenta que ese sistema está condenado al fracaso debido al atractivo del dinero para las empresas incipientes. “Si eres un ingeniero talentoso y tienes una buena idea en Facebook, ¿por qué crearla mientras estés en Facebook y enriquecer más a Mark Zuckerberg?”, preguntó.
Lo que es más, al crear nuevas funciones fuera de su aplicación principal, Facebook pudiera estar limitando su capacidad para promover sus innovaciones a sus usuarios básicos. Sin embargo, aunque Paper ha estado languideciendo en las gráficas de popularidad de aplicaciones, Zuckerberg dijo que no estaba preocupado, pero dispuesto a esperar a que Paper y otros proyectos de Creative Labs lentamente se ganen a su público.
Hay una lógica en esta visión. “A menudo se ve que aislar a los equipos innovadores de algunas de las demandas comerciales de una compañía –dándoles un estatus protegido y de cuarentena– es una de las mejores formas de promover la innovación”, argumentó Andrew Razenghi fundador del grupo consultor StrategyLab.
Pero falta por ver si Facebook se las arreglará para convertir eventualmente a nuevas aplicaciones como Paper en algo grande.
La estrategia de Creative Labs encaja con la visión de Zuckerberg de que algunas partes del internet móvil son mucho más grandes y más complicadas de lo que había pensado previamente. Señaló que WhatsApp y Messenger de Facebook eran nominalmente idénticas –ambas son usadas para enviar textos– pero que después de estudiar las enormes bases de usuarios de ambos productos, Facebook encontró que estaban siendo usados por personas diferentes para propósitos diferentes. “Pienso que básicamente vimos que el espacio de los mensajes de texto es más grande de lo que habíamos visto inicialmente”, dijo.
Esta idea explica el creciente apetito de Facebook por las adquisiciones. En una enorme red móvil, servicios como WhatsApp e Instagram pueden beneficiarse de los recursos de Facebook mientras mantienen sus propias comunidades y, crucialmente, no destrozan la propia base de usuarios de Facebook.
También explica la disposición de Facebook a ser más laxo con su propia marca. “Nos apartamos de nuestro camino para llamarle simplemente Paper, no Facebook Paper”, señaló Zuckerberg sobre la nueva aplicación. “Una de las cosas que estamos tratando de hacer con Creative Labs y todas nuestras experiencias es explorar las cosas que no están vinculadas a la identidad de Facebook”.
Si el nuevo plan tiene éxito, entonces, un día grandes partes de Facebook quizá ya no se parezcan a Facebook; y tal vez ni siquiera lleven el nombre de Facebook. Estará en todas partes, pero quizá no lo sepamos.