Neocineasta nacional
Camila viene en un paquete pequeño, pero con muchas ganas de romperlo en la industria nacional de cine. Claro, que como recién comienza, tiene un largo camino por delante. ¿Será que algún día se ganará un Óscar?
¿Qué onda con tu facha?
Tengo una camisa flannel, pero no me gusta usarla con jeans. No me gusta como se ve en las mujeres con jeans. Tengo más bien una falda. ¡Y mis zapatos son divinos!
Oh... no has sido tan alta. Tienes tremendas plataformas. ¿De dónde los sacaste?
Los compré en internet.
¿Las medias también? ¿O vinieron con los zapatos?
No, esas me las compré antes.
¿La cartera?
Es mi cartera para todo.
¿Es tu todóloga?
Sí, no me gusta andar con carteras pequeñas.
No sé mucho de carteras, solo que las mujeres son capaces de meter de todo ahí.
Yo solo necesito pocas cosas. Prefiero usar bolsillos, con eso soy feliz.
Por eso ando con mis bermudas que tienen mil bolsillos. ¿Cómo así te vas a estudiar cine?
Me voy a Savannah, al SCAD. Iba a estudiar fotografía pero el cine me gustó más. Me parece más mmm... ¡no sé! ¡Quiero revolucionar el cine ecuatoriano!
¡Ya era hora! Entonces, ¿no vas a ser de esas que salen con unos dramas casi telenovelescos, con tintes nacionalistas y de reivindicación social?
No, ¡quiero hacer algo dark!
¡Qué bueno! ¡Variedad! ¿Qué parte de la producción te gusta?
Me gusta millón las películas que son como eye-candy, disfrutas su parte visual. Quisiera ser como... ¿has visto El laberinto del fauno?
¡Por su pollo! ¡Guillermo del Toro!
¡Es mi “aaaaaay”! Me encanta su estilo, me encanta lo visual que hace. Lo amo.
¿A qué parte te dedicarías?
Me llama más la atención poder hacer algo con lo que pueda darle vida a mis ideas... que no sean...
¿Estáticas? ¿Que sean dinámicas?
¡Sí, no me sé expresar! ¡Perdón!
Guionista no vas a ser, ¡eso parece estar claro!
¡No, no! (risas) seré directora de arte o de fotografía. De pequeña quería el Óscar a la mejor actriz, ahora quiero uno ¡pero para la mejor directora!