Hijo adolescente
La señora Nancy es una lectora que nos escribe desde Machala, provincia de El Oro. Nos refiere que cada domingo comparte el contenido de esta columna con sus tres hijos, que su hija mayor, 16 años, está encantada y sigue cuidadosamente los consejos que aquí se presentan; que su hijo menor, 9 años, solamente escucha y escucha, pero con quien tiene muchos encuentros es con el que tiene 12 años, que siempre discute, va con gorra a todas partes, porque tiene casi dos docenas y de todos los colores y se resiste a vestir adecuadamente, según la ocasión.
Establecer la diferencia entre ser un coleccionista y llegar vestido de forma apropiada al sitio que vamos.
Hay que recordar que las gorras son bienvenidas en ocasiones específicas, por ejemplo, para protegerse del sol; también la usan los señores mayores para cubrir la calva.
En los climas fríos una gorra, o el sombrero, es lo ideal porque contribuye a mantener el calor corporal.
Si juega béisbol, si va al estadio o a la playa, está perfectamente justificada la gorra y no importa si la visera está hacia adelante o atrás.
No es correcto ir a la iglesia, a la clase o a ninguna casa con gorra.
Tampoco es apropiado sentarse a la mesa con la gorra en la cabeza. Las gorras solamente se utilizan en espacios abiertos, nunca bajo techo.
Si es integrante de la banda del colegio y el uniforme impone el uso de gorra, es lo adecuado. En este caso, lo que hay que hacer es respetar las normas del uniforme. El sentido de individualidad al vestir o seguir los dictados de la moda está bien para la vida social, pero en el colegio debemos respetar el uniforme.
Las normas de disciplina y de buena convivencia comienzan en esta etapa de la vida. Pronto tendrá que vestir formalmente para ir a solicitar trabajo.
El éxito al vestir no es otra cosa que saber seleccionar adecuadamente la ropa, según la edad y la ocasión.
No es lo mismo vestir para una fiesta de graduación que ir a la playa. Es importante distinguir lo informal, o casual, semiformal y formal. Dejarse guiar por los padres es éxito asegurado. (O)