Sin parásitos a lo natural

Existen recetas preparadas en la cocina para desparasitarse. También conviene hacerse una depuración del organismo.

El ritmo rápido de la vida que llevamos y el alto consumo de comidas chatarras o preparadas en la calle conducen a una acumulación de parásitos en el organismo.

Ellos están presentes en los alimentos o en el agua y pueden variar en tamaño, desde pequeños organismos unicelulares a gusanos visibles a simple vista. Incluso su ciclo de vida también puede variar.

Según Ricardo Alberto Ahrens, doctor en medicina tradicional china, los más comunes  son la Giardia duodenales, Cryptosporidium parvum, Cyclospora cayetanensis, Toxoplasma gondii, Trichinella spiralis, Taenia saginata (tenia de res) y Taenia solium (tenia del cerdo), entre otros.

“Mientras que algunos parásitos utilizan una sede permanente, otros pasan por una serie de fases de desarrollo con diferentes animales o seres humanos. Pueden transmitirse de animales al hombre o viceversa o entre las personas”.

Para el médico Rafael Serrano Rumbea, especialista en medicina biológica regenerativa y terapias de estimulación biológica, cuando a estos parásitos les brindamos el medio ambiente apropiado para que se reproduzcan, crezcan y se multipliquen, es cuando el individuo tiene problemas de salud. Sufre de diarreas constantes, dolores estomacales o dispepsia (gases) e incluso pueden causar cansancio crónico, migrañas, mareos, acné, picazón, entre otros.

Natural o farmacológico

Para eliminar los parásitos del cuerpo, dice Ahrens, existen muchos remedios caseros simples, pero no funcionan bien en todos los casos y para todos los pacientes, como aquellos que tienen el sistema inmunológico debilitado, que requieren medicamentos farmacológicos fuertes, de ahí la importancia de estar en manos de un profesional. Por ejemplo, “las recetas a base de hierbas chinas son fáciles y eficaces. Incluso el uso de ozono como un método adicional es viable para erradicar no solo los parásitos, sino las bacterias y los virus nocivos”.

Serrano asegura que los antiparasitarios naturales eliminan no solo los parásitos a nivel digestivo sino hepático, pancreático y sanguíneo, mientras que los medicamentos farmacológicos únicamente los que están a nivel digestivo.

“El desparasitado natural es eficaz y efectivo siempre y cuando el paciente se alimente saludablemente y tome los medicamentos naturales que se prescriben. De nada o poco sirven si se continúa con el mismo estilo alimenticio que lo conduce a llenarse de ellos”.

Cuando los parásitos han muerto, agrega, generan toxinas que se acumulan en el cuerpo. Por esto es importante antes y después de un ciclo de desparasitado realizar limpiezas intestinales para eliminarlos definitivamente del cuerpo. Puede ser una purga con áloe vera o un lavado intestinal o un enema. De lo contrario va a generar molestias al paciente que lo realice y pensará que el tratamiento no está haciendo efecto, siendo lo contrario.

Fórmulas a la mano

Para Serrano es recomendable hacer un ciclo de desparasitación entre tres y cuatro veces al año. Todo depende de la alimentación que lleve la persona y que dentro de esta elimine los alimentos que aumentan la acumulación de parásitos como son los lácteos, harinas y carnes rojas o de cerdo.

Una receta casera sencilla, dice,  es tomar una gota por kilo de peso de propóleo (sustancia que obtienen las abejas de la yema de los árboles). Es un antiparasitario de amplio espectro muy efectivo que se divide en dos tomas: una en la mañana y otra en la noche. Se ingiere durante una semana y se descansa otra. Luego se vuelve a tomar una semana y se vuelve a descansar otra.

Este ciclo se repite durante seis semanas y elimina los parásitos circulantes y los huevos que eclosionarán en los intermedios de descanso.