‘Me separé porque no tenía valores’
Quería compartir mi experiencia en relación a mi vida matrimonial. Me casé hace cinco años con un hombre supuestamente apegado a la religión cristiana. Pero a medida que el tiempo pasaba me di cuenta de que él no respetaba los sacramentos y que no se preocupaba por educar a mis dos hijos con valores.
Él no era un buen ejemplo para ellos y menos para mí. Aunque lo amaba mucho, su forma de ser, poco a poco, iba decepcionándome hasta que tomé la decisión de alejarme de él, por el bien de la familia. Vivir a su lado me mantenía en constante pecado. No es que yo sea una fanática religiosa, sino una mujer cuyos padres sí me enseñaron a valorar a las personas, a respetarlas y a no robar. Así que pensé que no quería que mis hijos aprendieran malos ejemplos de él. He leído tantos casos en El Especialista de personas agredidas, violadas, separadas y sufridas. Por eso pienso que las personas debemos tomar decisiones importantes para impedir que el materialismo o la falta de valores destruya a la familia.
Eufemia,
Guayaquil