Islas de la inspiración

A principios del año anterior, el cantante Daniel Betancourt visitó las islas Galápagos para cumplir compromisos de trabajo, pero ahora confiesa que el viaje resultó mucho más provechoso de lo que él imaginó.

De su paso por la isla Isabela, el artista expresó: “Quedé sorprendido por la paz que se respira, alejada de todo, lo hermosa que es la ciudad y su gente. Tal vez es con lo que más me identifico”.

Esa paz colaboró con él en su faceta como compositor. “Solo en ese viaje de trabajo terminé escribiendo como cinco canciones que no estaban esperadas, cada vez que tenía un momento para mí las ideas fluían como si estuvieran destinadas en ese lugar”, señala.

Las islas Galápagos se convirtieron en un relajante nido de inspiración y melodías que Daniel transformó en nuevas canciones.

Así, este guayaquileño alimentó su faceta poética, mientras que sus gustos gastronómicos fueron satisfechos por una amplia variedad de platos elaborados con productos del mar. “Fue una delicia poder comer platos típicos con mariscos totalmente frescos en el momento”, comenta.

Daniel también tuvo la oportunidad de inspirarse en los paisajes de Santa Cruz y San Cristóbal durante este viaje que consideró totalmente revelador para él. “Tuve la oportunidad de darme cuenta de lo que tenemos y de lo impresionante que es, aunque a muchos se les pasa por alto o prefieren pasar vacaciones en otro país”, concluye el artista.