Manaos: La amazónica

04 de Mayo de 2014
  • El estadio Vivaldo Lima, o Arena da Amazônia, se rodea de la riqueza industrial y paisajística de Manaos.
  • El Teatro Amazonas es obra del arquitecto italiano Celestial Sacardim.
  • Barcos turísticos aproximan a los viajeros al colorido encuentro de las aguas de los ríos Negro, de aguas oscuras, y Solimões, de color claro.

Manaos luce bellamente como la más aislada de las 12 sedes del Mundial de Brasil.

No hay carretera que lleve a Manaos. El avión y el barco son las únicas maneras de acceder a esta urbe amazónica de dos millones de habitantes.

Por ello, si Ecuador hubiera tenido que jugar en esa sede alguno de sus primeros partidos, habría sido una aventura recomendable llegar hasta su renovado estadio Vivaldo Lima, conocido como Arena da Amazônia, navegando desde la ciudad de Francisco de Orellana (Coca), en nuestra provincia oriental de Orellana, en alguna de las embarcaciones que transitan a lo largo del río Napo con dirección al gran Amazonas.

Pero los ecuatorianos no fuimos dirigidos a esa sede que acogerá cuatro partidos mundialistas: Inglaterra-Italia (junio 14), Camerún-Croacia (junio 18), Estados Unidos-Portugal (junio 22) y Honduras-Suiza (junio 25).

Por ello, los turistas europeos, africanos, norteamericanos y centroamericanos (ninguno con contacto directo con el río Amazonas) tendrán la oportunidad de aproximarse a un escenario urbano-natural insólito con los siguientes atractivos.

Teatro Amazonas. La también llamada Casa de la Ópera, inaugurada en 1876, es una elegante construcción de corte clásico que ha servido de escenario a grandes intérpretes. Su suntuosidad era reservada para la nobleza portuguesa de antaño, así que las maderas preciosas de sus pisos sirvieron de salón de baile, sus lámparas italianas daban luz a sus salones y las butacas de suaves terciopelos recibieron a los caballeros y damas de élite.

El encuentro de las aguas. El río Amazonas se forma por la unión de dos grandes afluentes: el Negro, de aguas oscuras, y el Solimões, de aguas más claras con tonalidad arcillosa. Ambos ríos corren lado a lado sin mezclarse entre sí por más de 6 kilómetros, por ello puede verse con total nitidez cómo las aguas negras y las marrón viajan ondulantes sin unirse.

Mercado Municipal Adolpho Lisboa. Situado a orillas del río Negro, es una bellísima obra arquitectónica construida en el siglo XIX. Inspirado en el mercado parisino de Les Halles, es la puerta de entrada de la producción pesquera y agrícola en el estado de Amazonas. Tras una remodelación volvió a abrir en el 2013.

Bosque de la Ciencia. Incluido en el recinto del Instituto Nacional de Investigación de la Amazonía (INPA, según sus siglas en portugués), ofrece a los visitantes la experiencia de ver de cerca el manatí del Amazonas, el mayor mamífero acuático de la región. También se pueden dar paseos, ver exposiciones o conocer otros animales, como nutrias gigantes, tortugas e incluso yacarés.

Zoológico del Centro de Instrucción de Guerra en la Selva (CIGS). Fue construido en 1967 para presentar a los miembros del ejército brasileño elementos de la fauna y la flora amazónicas. A partir de 1969, el Zoológico es uno de los principales puntos turísticos de Manaos. El lugar únicamente cuenta con especies amazónicas brasileñas. En total, hay 162 animales de 56 especies, varias de ellas en peligro de extinción en Brasil. Jaguares, serpientes y la bellísima águila arpía están entre los favoritos de los visitantes.

Fuentes: FIFA, www.wikipedia.org, www.suramericaencleta.com.

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