Túneles profundos
Bajo la Segunda Avenida de Manhattan crece el mundo subterráneo de la línea de metro más esperada por los neoyorquinos.
El subway de Nueva York fue inaugurado el 27 de octubre de 1904. Desde entonces, su demanda ha provocado que crezca como si se desenroscara hasta el infinito, al punto de que este sistema de trenes suma actualmente 368 kilómetros de ruta y 468 estaciones para atender a más de 5 millones de pasajeros cada día laborable.
Este servicio de transporte, uno de los más complejos del mundo, ha convertido al neoyorquino en una criatura subterránea acostumbrada a deambular entre muros arrimados a la roca taladrada, e iluminada por la luz artificial que pone brillo a sus desplazamientos en el transcurso de su rutina.
Pero ni siquiera ese carácter amarrado a la tierra profunda lograría considerar comunes los lóbregos escenarios que se están asomando desde el 2007 con la construcción de la línea de la Segunda Avenida, ansiado proyecto que la ciudad ha reclamado desde que fue propuesto en 1929.
La Gran Depresión, la Segunda Guerra Mundial y la falta de decisión política han sido razones para posponer durante décadas esta ampliación que descongestionará el tránsito de pasajeros que circulan diariamente en la única línea en la zona de East Side, a lo largo de la línea de la avenida Lexington: exactamente 1,3 millones de usuarios, lo cual supera la carga combinada de los sistemas de tránsito público de las ciudades Boston, Chicago y San Francisco.
La rutina de Nueva York permanece caótica en superficie, pero bajo tierra debe mantener una estricta planificación cumplida por 475 obreros que tienen la misión de remover 425 mil metros cúbicos de roca y 170 mil metros cúbicos de tierra, lo cual supera el volumen de la mitad del edificio Empire State.
Esa será la primera etapa de la línea de la Segunda Avenida, planeada para ser inaugurada en diciembre del 2016. La longitud total del proyecto será de 13,6 kilómetros y contará con 16 estaciones.
Un gigante para Quito
Curiosamente, la primera línea del Metro de Quito, cuya construcción está prevista para iniciarse en pocas semanas, contará con una dimensión mayor: 23 kilómetros de extensión y 15 estaciones, estructura que en 34 minutos planea recorrer la ciudad desde Quitumbe (en el sur) hasta El Labrador, cabecera sur del actual Aeropuerto Internacional Mariscal Sucre (en el norte).
Esta obra, que supone una inversión de $ 1.400 millones, planea ser inaugurada en el 2016 para soportar un tráfico de 377 mil pasajeros al día, que se desplazarían en los trenes a una velocidad de 37 km/h. Contando con la asesoría del Metro de Madrid, se contemplan además tres líneas: para el norte, el nororiente y el suroriente. Todo esto para resolver el agobiante tráfico que soporta la capital.
Tanta expectativa ha generado esta obra que la Graduate School of Design de la Universidad de Harvard (Massachusetts) escogió a Quito para realizar un estudio sobre el impacto urbanístico que significará el Metro, destacando que la urbe ya no estará dividida en norte, sur, centro y los valles.
El primero en América Central
Ciudad de Panamá también apunta al transporte subterráneo. Cerca de 3.000 trabajadores de 21 nacionalidades y 8 idiomas distintos han avanzado ya más del 30% de esta obra que supone 1.800 millones de dólares de inversión, informó a la prensa el director del proyecto, Roberto Roy.
Este Metro, el primero que se construye en un país de América Central, prevé transportar por hora en la capital panameña hasta 30.000 personas en ambos sentidos en su primer ramal, de norte a sur, con 14 kilómetros de longitud (23 minutos), con el que se espera atenuar el caos del transporte.
Una curiosidad: esta obra no tendrá baños, porque según los expertos, son sitios de robos, abortos, asesinatos y secuestros.
Fuentes: guiadenuevayork.com, Autoridad Metropolitana del Transporte (MTA), metrodenuevayork.blogspot.com, metrodequito.gob.ec, EFE.
Curiosidades
El metro más largo es el de Shanghái, con 420 km de ruta, seguido por Londres, con 415 km de longitud, y Nueva York con 368 km.
Los siguientes en la lista son los metros de Tokio (292,3 km), Seúl (287 km), Moscú (265,2 km), Madrid (226,5 km), París (212,5 km) y Ciudad de México (201,7 km).
En África solamente existen dos ciudades con metro: El Cairo y Túnez.
El metro de Pyongyang, en Corea del Norte, es el más profundo del mundo, a 120 metros bajo la superficie.
El metro de Londres es el más antiguo, ya que fue inaugurado en 1863.
Los metros de Moscú y Tokio son los más utilizados del mundo: con 3.200 millones y 2.700 millones de pasajeros anuales, respectivamente.
Los metros de Lisboa, Moscú y París son los considerados más bonitos del mundo, por su arquitectura, decoración y continuas exposiciones.
En la red de metro de Shanghái se encuentra el primer tren de levitación magnética del mundo.
Fuente: locuraviajes.com
Terminal Grand Central
Quizás la estación más famosa del mundo es la Grand Central de Nueva York, considerada un atractivo turístico histórico de la Gran Manzana.
Es la más grande del mundo en número de andenes: 44.
Sudamérica
La región cuenta con metros en ciudades como Caracas, Maracaibo, Medellín, Recife, Sao Paulo, Río de Janeiro, Porto Alegre, Santiago de Chile y Buenos Aires (foto).
No se considera tal obra para Guayaquil.