Enamorado del violín
El violinista Jacob Ormaza culminó su gira como miembro de la YOA y ahora está en Estados Unidos, donde participará de un festival en California.
Lo que para el guayaquileño Jacob Ormaza comenzó como una obligación, ahora se ha transformado en el amor de su vida: el violín y la música.
Fue a los 11 años cuando después de ver una presentación del violinista ruso Maxim Vengerov, Jacob decidió que la música se convertiría en el centro de su vida.
“Estaba totalmente seguro de que lo que yo quería para mi vida era una vida como músico. Una profesión por verdadero amor al arte”, recuerda Jacob, quien considera a Tchaikovsky su músico favorito, en especial su Sinfonía número 6 y su Concierto para violín.
Entre las presentaciones que recuerda con más cariño, por haber marcado el inicio de su carrera, están su primer espectáculo como solista con la Orquesta Juvenil de Guayaquil, en diciembre del 2005, y luego su participación en un festival en Quito, en enero del 2006.
Desde entonces, sus esfuerzos y sacrificios han sido recompensados.
Jacob viajó este año a Chile como integrante de la Joven Orquesta de Las Américas (YOA, por sus siglas en inglés), luego de haber audicionado para ser uno de sus miembros, a través de un video que colgó en YouTube.
Esta es una agrupación formada por 80 de los más destacados músicos jóvenes del continente, quienes participan todos los años en una gira por un determinado país, en esta ocasión el elegido fue Chile.
“Había que subir un video con la grabación de unos extractos orquestales que ellos disponen. Eso lo hice en febrero; en marzo me llegó la carta de aceptación y enseguida la invitación a formar parte de esta orquesta”, recuerda.
La gira arrancó el pasado 29 de junio en La Serena, en Chile, donde tuvieron dos presentaciones, luego continuaron en Valparaíso, Santiago, Temuco, Concepción y Frutillar.
“Me sorprendió mucho el alto nivel de la Orquesta. Me he encontrado con músicos de extraordinario talento, como un trompetista y una flautista estadounidense, además de otros muy talentosos músicos latinoamericanos”, detalla. “Estoy muy contento de formar parte de esta orquesta de talla internacional y creo que ha sido hasta ahora la mejor experiencia que he tenido en mi vida, en lo profesional”, expresa.
Jacob regresó al país el pasado domingo 29 de julio, pero no se quedó mucho tiempo, pues tuvo que partir hacia Estados Unidos para participar en el Festival de Música de Cámara en la ciudad de Idyllwild, California, el cual se prolongará hasta el 20 de este mes.
Su agenda también luce copada para el resto del año. En octubre ofrecerá un concierto con la Orquesta Sinfónica de Guayaquil y en diciembre se presentará con la Orquesta Sinfónica de Loja. “Además, para noviembre tengo planeados unos recitales de música de cámara con la pianista cubana María de los Ángeles Horda”, revela.