Subjetividad femenina

Dos son los temas básicos de la narrativa de la escritora brasileña Nélida Piñón: la memoria y la subjetividad femenina. Amparada en estos dos ejes se desplaza también hacia la estructura patriarcal de la sociedad, el futuro, la idea de progreso, el amor, la imposibilidad del amor, la culpa, la traición y muchas otras aristas que forman parte del tránsito social y humano. Todos estos elementos se encuentran en su libro de cuentos El calor de las cosas, publicado en 1980 y que es una representativa muestra de la narrativa corta de esta autora, devota de Machado de Assis y Clarice Lispector.

Piñón, nacida en Brasil en 1937, en una familia de ascendencia gallega, fue la primera mujer que presidió la Academia Brasileña de las Letras, entre 1996 y 1997. Es una de las escritoras clave del Brasil contemporáneo, con obras como La República de los sueños, que es la historia de la migración de sus antepasados de Galicia a Brasil; Voces del desierto, Dulce canción de Caetana, entre otras. Obtuvo el Premio Rómulo Gallegos de Novela en 1995 y el Premio Príncipe de Asturias de las Letras en el 2005.

El calor de las cosas es una condensación de su universo narrativo, con un conjunto de historias que se abre con el cuento El jardín de los olivos, propuesto como una carta (varios de los cuentos tienen una estructura epistolar). Es una misiva que el narrador protagonista le envía a Ze, su amante, en la que le cuenta su angustia por lo que él considera fue una delación a su amigo Antonio. La historia transcurre en medio de la dictadura. El narrador protagonista ha sufrido el encarcelamiento y la tortura. El cuento habla de la fragilidad, de la traición y de los renunciamientos a los que a veces están abocados los seres humanos. El narrador ha cambiado su visión, su ilusión de lucha. Ahora tiene claras sus prioridades, pero no está libre del dolor. El cuento es una confesión, una despedida para su amante Ze y, sobre todo, una reflexión sobre sí mismo.

En el cuento I Love My Husband, la narradora es una voz femenina y el ámbito es el doméstico. Ella habla del amor a su marido y de la devoción con que se entrega a los quehaceres de la casa. En nombre de la armonía, de la felicidad, del hogar, ha tenido que postergar o desechar sus deseos. Todo aquello que le gustaría ser y hacer. Esta pieza está cargada de ironía y se convierte en una fuerte crítica a la estructura patriarcal de la sociedad.

En el mismo talante está escrito El ilustre Menezes, que es una recreación o una versión libre del cuento Misa de gallo, del brasileño Machado de Assis, y transcurre a finales del siglo XIX. En este vemos a un matrimonio integrado por un escribano juerguista que ha enviudado y vuelto a casarse. Su nueva esposa, al igual que la anterior, es recatada, sumisa, confinada a la casa, mientras que él se divierte y tiene amantes. Pero a la casa ha llegado a hospedarse un joven, que es sobrino de su difunta esposa, y entonces la historia de sumisión de su esposa actual puede tener una vuelta de tuercas.

El libro, integrado por más de una docena de cuentos, permite ver cómo Piñón trabaja la subjetividad femenina. O cómo desde su narrativa confronta las estructuras patriarcales de la sociedad, que todavía se muestran de diversos modos, pese a que muchos crean que luchas como las del feminismo hoy no tienen ya sentido. (O)

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