Periodismo y literatura
El escritor nicaragüense Sergio Ramírez, ganador de los premios Alfaguara en 1998 e Iberoamericano de Letras José Donoso en el 2011, dijo que una de sus “aspiraciones más grandes” es que la narrativa periodística se parezca "cada vez más" a la narrativa literaria, y viceversa.
Ramírez, vicepresidente de Nicaragua durante el primer Gobierno sandinista (1979-1990), opinó que la narrativa periodística debe tomar elementos de la literaria, para que así “las dos se alimenten”. Y consideró que esa retroalimentación permitiría que en Centroamérica exista “una narrativa literaria como un periodismo de altísima calidad”.
El escritor hizo esas valoraciones a propósito de la presentación en Managua de su último libro Flores oscuras (Alfaguara). “Es una colección de doce cuentos sobre temas muy variados, pero quizás aparezcan unidos por un hilo conductor común que es la vida de personas sencillas que saltan a las páginas de algún tipo de celebridad, no muchas veces por su bien, porque son víctimas o son victimarios”, explicó.
A partir de sus personajes narra historias cotidianas “sobre la vida común y la vida real”, sobre las sombras del poder, la corrupción, la muerte y la violencia, pero en las que también se hace eco del amor, la soledad, la nostalgia y la familia.
La crónica periodística “es un género que a mí me fascina, porque da la oportunidad de tomar distancia de los acontecimientos, narrar como si se tratara de hechos periodísticos, aunque se trate de hechos de invención. Además, permite usar la técnica del distanciamiento, la presentación fría de los datos, y darle la voz a todo el mundo para que el lector saque sus propias conclusiones”.