Via Crucis viviente en el Cerro de Carmen

La iglesia Santo Domingo de Guzmán y el hospital Luis Vernaza, las entidades más antiguas de la ciudad, alistan Vía Crucis viviente.

La Semana Santa es sin duda uno de los momentos más significativos para reflexionar y ahondar en la fe cristiana, de manera muy especial en el día del Viernes Santo, cuando se recuerda la crucifixión de Jesús.

Por ello, esta conmemoración anual motiva cuantiosas muestras de religiosidad. Entre ellas se destaca la escenificación de varios sucesos protagonizados por Jesucristo hasta su deceso en la cruz (conocido como Vía Crucis).

Una de estas dramatizaciones guarda una gran hermandad histórica, además de su compromiso de promover la fe cristiana entre las comunidades que sirven, entre otras labores conjuntas.

Es la representación del Vía Crucis a cargo de los grupos pastorales de la parroquia Santo Domingo de Guzmán y de la salud del hospital Luis Vernaza, entidades que comparten casi los mismos orígenes (los inicios de la primera datan de 1548 y de la segunda, de 1564), asentadas en el cerro del Carmen, junto a su par el Santa Ana, donde Guayaquil empezó a germinarse.

“Esta representación nace en el año 2009, en el que se organiza en un solo evento una serie de actos penitenciales que grupos varios hacían por su cuenta en la ruta que hoy se sigue, durante la Semana Mayor”, explica José Estrada Guzmán, administrador del hospital.

La acción se desarrolla principalmente en las calles del cerro del Carmen, donde se han escogido algunos puntos para conmemorar varias de las catorce estaciones del camino de la cruz. Incluyen casas de familias que “con mucha fe prestan sus portales para representar cada momento de recogimiento”, agrega Estrada.

“La Iglesia de Santo Domingo pone los actores y guías espirituales, y el hospital Luis Vernaza asiste con personal de apoyo, tanto de colaboración organizacional como en salud y emergencias que se puedan presentar en el evento. Una ambulancia con sus paramédicos acompañarán a los caminantes”.

Cabe recalcar que además de esta labor, los grupos de acción pastoral son personas voluntarias que colaboran de forma permanente en las actividades de una parroquia católica. Un ejemplo de ello son las obras de solidaridad con la comunidad y el acompañamiento espiritual a enfermos y sus familiares, acciones que son emblemáticas de ambos grupos pastorales mencionados.

Vía Crucis viviente

Alrededor de 40 jóvenes interpretarán a los personajes de la Pasión, como Jesús, la Virgen María, Herodes, Pilatos, soldados romanos y los fariseos. Para ser seleccionados, los integrantes requirieron una asesoría espiritual que se extiende más allá de la Semana Mayor, asegura el padre José Carlos Tuárez, párroco de la iglesia Santo Domingo de Guzmán.

“Los chicos se preparan durante el año con retiros, charlas y convivencias, para que espiritualmente entiendan el sentido de la Pasión de Nuestro Señor”, añade el sacerdote. Además, los elegidos deben cumplir características ejemplares, como mantener una vida de piedad, no tener vicios y poseer espíritu de colaboración.

“Son chicos serios y comprometidos con la sociedad. Se dedican a ayudar a personas desfavorecidas, como los ancianos del sector, en la limpieza de sus casas, o visitan a los enfermos del Luis Vernaza”. Ellos son: Sebastián Checa (Jesús), Lizbeth Checa (María), Aaron Banchón (Juan), Narcisa Macías (María Magdalena), Efraín Serrano (José de Arimatea), Jairo Salazar (soldado), Marcos Era (Simón el Cirineo), Sheyla León (María de Cleofás).

La procesión se desarrollará este Viernes Santo. El recorrido se inicia a las 09:00, en el templo, avanza hacia la casa de salud y de allí, al cerro. Los grupos pastorales leerán pasajes bíblicos e invitarán a la oración y cantos apropiados en cada estación

Finalmente regresa a la iglesia, aproximadamente al mediodía. Allí culminará la actividad, la cual se estima convocará entre 400 y 500 fieles. Luego de la Pasión, los devotos pueden celebrar otros actos litúrgicos preparados por los padres dominicos. (I)