A CLASES Libros como los clásicos de la literatura ayudan a entender el mundo. la re vista 31 ......................... La literatura revela el corazón EP n estos tiempos resulta oportuno destacar la importancia de la Literatura en la enseñanza, indica Carlos Ordóñez, quien por 30 años dictó esa cátedra en colegios fiscales y particulares de Guayaquil. “En esta época tecnológica, aparentemente solo las ciencias y la tecnología merecen ser estudiadas. Pero el hombre no tiene vocación de robot. Primero nuestros jóvenes deben aprender a ser humanos y, en este empeño, una de las asignaturas que más contribuyen a esta humanización es la lengua y, dentro de ella, la lite ratura”, considera este profesional, jubilado hace 7 años. Un logro fundamental del maestro debería ser dejar sembrado en los alumnos el gusto por la lectura. “Los padres también podrían ser los motivadores de este gusto”, agrega el experto, quien recomienda aprender un segundo idioma para ampliar el escenario de tal conocimiento que permite “un viaje apasionado por el corazón humano”, señaló el escritor británico Salman Rushdie. Alemania González, quien suma 18 años como profesora de Lengua y Literatura en la educación secundaria y universitaria, dice que esta disciplina “hace pensar al joven y lo sensibiliza. Al leer, el joven conoce las realidades creadas por el escritor, que son mímesis del mundo real, y al entrar en la historia va encontrando un sentido particular al contenido, el cual le permite comprenderse a sí mismo, entender al mundo o reinve ntarlo”. La Literatura permite al alumno “enfrentarse con sus miedos, sus deseos o conocer las virtudes humanas o sus bajezas. Además, lo lleva a ser creativo y le exige aplicar procesos de pensamiento como observar, comparar, relacionar, ordenar, clasificar, analizar... Así, el joven lector se convierte en una persona creativa, crítica y sensible de su realidad”. Ella tiene dos novelas preferidas: Cien años de soledad (Gabriel García Márquez), que la sorprende cada vez que la lee, “pues me brinda algo distinto, nuevo y digo por qué no lo vi antes”. La otra, El perfume (Patrick Suskind), “me gusta, pues me hace consciente de que el olor es muy importante en la convivencia humana”. Ordóñez y González coinciden al recomendar que los textos para los alumnos “dependen de la edad, de los gustos personales en temática y géneros literarios, del medio ambiente en que viven y hasta de la capacidad económica. Cada alumno debería ir creando una pequeña biblioteca personal”, explica Ordóñez. (M.P.) sigue ›› ESPECIAL de la revista 31
Educando al alumno integral
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