El método de enseñanza Singapur
Las escuelas en Occidente empiezan a mirar y a apostar al modelo singapurense para enseñar Matemáticas. Magnates como Jeff Bezos les dan la razón.
En 2015, más de 100 escuelas del Reino Unido que habían cambiado su modelo tradicional de enseñar Matemáticas por un método observado en China y en Singapur, bajo la mirada de la Universidad Colegio de Londres y la Universidad de Cambridge publicaron sus resultados: habían registrado un incremento en la velocidad a la cual los estudiantes aprendían destrezas matemáticas.
Y en la prueba trienal PISA 2015 (Programa Internacional de Evaluación de los Alumnos, realizada a estudiantes de 15 años), Singapur fue el país con mejor desempeño en las tres áreas de examen: Matemáticas, Ciencias y Lectura.
Personajes como Jeff Bezos, director ejecutivo de Amazon y, según la revista Forbes, la persona más rica en el mundo en 2017 y 2018, confiesan haberlo incluido en la educación de sus hijos. “Intentamos de todo. Lecciones de mandarín, clubes y deportes y también el programa de Matemáticas de Singapur”, dijo MacKenzie Bezos en 2013, cuando el mayor de los hijos tenía 12 años.
Aproximación a la maestría
El método se enfoca en que los niños aprendan, no memoricen, los conceptos matemáticos, empezando por los numéricos y geométricos. Siguen tres fases (CPA): 1. Concreta, jugando con objetos de uso cotidiano. 2. Pictórica, dibujando bloques para representar los valores. 3. Abstracta, haciendo cálculos con cifras y símbolos. Así las Matemáticas cobran sentido porque se relacionan con la vida diaria de los estudiantes.
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Se le llama también el método del dominio o la maestría, porque requiere que toda la clase domine el concepto, no solo los que son mejores para las Matemáticas, para entonces avanzar al siguiente nivel.
El doctor en Matemáticas Yeap Ban Har, que viaja por el mundo hablando del modelo Singapur, dice que en realidad no se trata de un método. Para él se trata simplemente de buena enseñanza y aprendizaje.
El uso inicial de objetos comunes para los niños ayudará a que no desarrollen miedo o rechazo a las Matemáticas, dice Ban Har. Tampoco se sentirán solos durante el aprendizaje, porque se trabaja en equipo.
“No para todo el mundo”
Sin embargo, también hay críticos de que se cambie el modelo occidental, mucho más orientado a desarrollar en los niños una mentalidad intuitiva de las matemáticas antes de aportar conceptos.
El matemático Alexander Vernitski, de la Universidad de Essex, dice que aprender de esta manera haría que el proceso sea tan lento que para cuando los niños lleguen a las últimas etapas (conceptos algebraicos y analíticos) hayan olvidado lo primero.
Para el profesor Steve Chinn, especializado en enseñar Matemáticas a niños con dislexia, sigue siendo importante hacer énfasis en entender los conceptos matemáticos primero, para favorecer la memorización. Además, alega, no se puede pretender que todos los estudiantes alcancen el dominio de una destreza al 100%. Muchos no lo lograrán, en su opinión, y si el maestro no avanza al siguiente nivel hasta que todos lo logren, entonces muchos niños no podrán progresar.
“Todos los alumnos aprenden de manera diferente”, argumenta Chinn, “y puede no ser posible establecer una jerarquía estricta en los diferentes componentes en la Aritmética. Un niño puede desempeñarse bien en una tarea difícil, y fallar en otra aparentemente fácil”.
Así que el modelo singapurense, como todos, funcionará para algunos niños, pero no para todos, concluye, y añade que no hay información sobre qué perfiles responden mejor a él. En su experiencia enseñando a niños con dificultades de aprendizaje, considera que este no es el acercamiento apropiado para ellos.