Escogiendo pareja
Hay que transformar el patrón relacional para elegir de manera correcta al compañero.
Una de las razones por las cuales una persona fracasa en las relaciones de pareja es porque desde el principio no sabe lo que realmente busca en ellas. Y todo esto parte de qué tan bien esté consigo misma.
Para María Cristina Vásconez, coach ontológica, una relación de pareja sana es una extensión de cómo nos sentimos y vivimos a diario. Si somos alegres, si tenemos proyectos y si buscamos en la otra persona lo que nos complementa e interesa, así el vínculo florece.
Pero, agrega, si el individuo se siente infeliz, va al trabajo sin ganas, no está satisfecho con lo que hace o no tiene proyectos personales, muchas veces lo que hará para tratar de ser feliz es agarrar a una pareja para escudarse en ella, y esto es muy nefasto.
Básicamente, para escoger a una pareja es necesario empezar por analizar nuestro comportamiento en las relaciones con otras personas y así descubrir en qué se ha fallado para que no hayan funcionado. Muchas veces, la atracción física no es lo más importante, sino lo mínimo, afirma.
Con toda esa información, dice, lo que se busca es transformar lo que se llama el patrón relacional. Esto es para aprender a amar bien. Muchas mujeres, por ejemplo, tienen problemas de autoestima. Se conforman y aceptan lo que algunos hombres quieren darles y de paso no saben pedir. “Esto, porque operan con esa mentalidad y sistemáticamente me meten en relaciones con seres dominantes, y terminan eligiendo a ese tipo de individuos”.
El rediseño, explica, es un proceso de tomar conciencia. Cada persona trae una historia, actitudes, fragilidades, impedimentos e incapacidades y lo que este hace es rescatar eso para trabajarlo profundamente .
Primero hay que indagar el núcleo familiar. Lo que quedó instalado en nuestra infancia, es decir, cómo fue la relación con los padres, si quedamos con tristeza, con rabia o con baja autoestima, ya que esto se verá reflejado en las relaciones de parejas.
Segundo, dice Vásconez, hay que tener un cambio de actitud y aprender a hacer pedidos, es decir, saber lo que queremos de la pareja. Si se desea a alguien bueno, cariñoso o supercomprometido. “El compromiso es clave en la búsqueda de la pareja. Y esto es algo que se puede indagar desde la primera cita. Por ejemplo, cómo eres con tus hijos, con tu familia, con los amigos. Son preguntas como cuando nos entrevistan en un trabajo”, asegura.
“Lo que se busca o quiere de una pareja tiene que ver con una respuesta individual. Por eso las personas tienen que conectarse consigo mismas y ver qué las hace feliz. A unas les importa tener estabilidad económica, otras un proyecto familiar o quizás buscan a alguien cariñoso y con espíritu libre”.
Aciertos o errores
Según el psiquiatra español Enrique Rojas en su texto El amor inteligente, la elección de pareja es una de las experiencias más importantes de la vida, pues de su acierto o error se derivarán consecuencias fundamentales para la trayectoria del hombre.
“En la elección afectiva se retrata el ser humano, dejando muy claras las predilecciones que mueven su vida. Al elegir a otra persona, como hemos afirmado, uno enseña el modelo humano que le agrada, con todo lo que ello implica”.
El verdadero punto de partida, menciona, para la elección es tener un modelo, sea masculino o femenino, con un estilo aproximado. En él se dan cita aspectos externos, formales y otros muy diversos como la bondad, la inteligencia, la simpatía, la belleza, el dinero y un largo etcétera.
Pero, refiere, en una sociedad tan neurótica y tan complicada como la nuestra es habitual que ni siquiera se plantee esta cuestión tan medular, que no se busque un estilo concreto de persona, con todas las salvedades que impone la realidad de cada uno, sino al contrario: que las primeras relaciones se produzcan de espaldas a ello y con el tiempo, este descuido provoque el deterioro de la relación.
Relación tradicional vs. internet
Para la psicóloga clínica Cecilia Chávez Bowen de Larrea, a pesar de los avances tecnológicos, la manera tradicional de conseguir pareja es la más utilizada todavía. Actualmente se ven casos de parejas que se han conocido por internet. Por lo general uno es extranjero y, por cuestiones de distancia, la relación se ha manejado de esa manera.
“Tener que acostumbrarse a la cultura de la pareja y confiar todo el tiempo que están separados no es tarea fácil. Pocos llegan a formalizar la relación. Además, tarde o temprano uno de los dos deberá dejar su país, con todo lo que esto conlleva”.
Generalmente, quienes se conocen por internet suelen ser personas inseguras para socializar, tímidas o que no quieren pasar por citas tradicionales (o ya intentaron con malas experiencias). “Internet da una falsa sensación de seguridad, parece que uno no se expone, aunque puede ser riesgoso si se manejan las redes con imprudencia. Por eso debe tenerse mucho cuidado, aunque digan palabras bonitas y parezcan buena gente.
Claves que interesan
La psicóloga Cecilia Chávez Bowen de Larrea sugiere tomar en cuenta las siguientes recomendaciones si anda en busca de pareja:
• Es importante compartir valores. Una persona honesta no podrá vivir por un largo periodo con alguien deshonesto, por ejemplo, o con diferencias religiosas. (Hay casos que sí, pero muy raros).
• Es mejor que tengan amigos en común. Siempre es mejor (y actualmente hasta por seguridad) tener “referencias” antes de avanzar en una relación.
• Es indispensable investigar un poco sobre la persona que nos empieza a interesar, para no enamorarnos de alguien con quien no podremos llegar a algo serio o que nos va a hacer sufrir por su manera de ser (por ejemplo, un mujeriego puede ser muy atractivo, pero...).
• Para elegir bien la pareja, si tenemos varias experiencias malas, es mejor analizar, antes de intentar nuevamente, qué tipo de persona nos atrae y por qué. Veo muchos casos de mujeres que “caen en lo mismo” y al percatarse buscan ayuda para mejorar su autoestima.
• Así como esperamos honestidad en la pareja, hay que ser sinceros. No se puede construir una relación sobre bases falsas.
• No acepte salir con alguien que no le agrada únicamente por no estar solo. Se hace daño y perjudica a esa persona. Es mejor decir que no, dilatar situaciones es estresante.
• Si buscamos alguien para una relación temporal, sin compromiso, es más sano decirlo desde el principio. A veces no se está listo para formalizar y es mejor no dar falsas expectativas.