Obsesión de conservarlo todo
Va más allá de que la casa no esté como para recibir visitas. Es un problema financiero, social, emocional, de seguridad, de salud e incluso legal para quien lo padece.
Los realizadores de la serie documental Acumuladores, transmitida para América Latina por Discovery Home & Health, encontraron e hicieron famoso al que parece ser el mayor acumulador del Reino Unido: Richard Wallace, quien ganó un juicio contra el Municipio de su ciudad y conservó su derecho a acumular basura en el jardín y el interior de su casa, tres décadas de desperdicios que bloqueaban la puerta principal y lo obligaban a dormir en una silla y a arrastrarse para comer, ir al baño y salir.
Era legal, pero no bien visto y mucho menos seguro. La estufa de gas estaba rodeada y semicubierta de pilas de periódicos viejos. La intención, según Wallace, era construir una hemeroteca, un ideal que recién empezó a tomar forma a partir de que uno de sus vecinos, un jardinero profesional, se acercó a él, se involucró en la enorme tarea de limpieza y consiguió el apoyo de la comunidad.
Fue un buen intento, al menos para el vecindario, ya que el acumulador había rechazado la terapia psicológica. Reconocía que la basura se había convertido en un problema que depreciaba su propiedad, pero negaba que eso tuviera algo que ver con su salud mental.
Una adicción
La psicóloga Glenda Pinto describe este trastorno como una ‘tendencia a adquirir’, sea comprando, pidiendo, robando o recogiendo en la calle objetos inútiles, peligrosos o insalubres. La OMS es severa: lo considera una enfermedad física y lo ubica entre las adicciones.
El acaparamiento es egosintónico, es decir, el acumulador siente que no tiene ningún problema. Con el tiempo descubre que las habitaciones ya no cumplen su función debido a la falta de espacio, que resultan inhabitables y que es imposible mantenerlas ordenadas, y llega a pensar que limpiar no tiene sentido. Esto suele ir acompañado de disposofobia, un miedo extremo a perder los objetos atesorados.
Las causas
El psicólogo y especialista en comportamiento acumulador Stephen Kellett, quien ofreció sus servicios a Richard Wallace (y fue rechazado), dice que hay dos tipos de este trastorno: desarrollado (debido a algún trauma, a menudo en la niñez) y biológico, que corre en la familia.
Mientras, Pinto considera que también puede deberse a un estado depresivo muy profundo o ser un ‘mecanismo de defensa’ para mantener las emociones bajo control.
Ambos coinciden en que imponer el orden al acumulador puede agravar su conducta y no servirá de nada, pues el problema persiste. La persona no tardará en llenar el espacio otra vez. “Si el afectado trata de salir repentinamente de su rutina, se ve abrumado por la ansiedad y, por lo general, vuelve a caer en el consumo”, advierte Pinto.
Asimismo, comenta que son pocos los casos que llegan a consulta, por la renuencia del paciente a admitir que algo anda mal. Lo más común es que acudan para tratar problemas familiares o de pareja, y en la exploración se descubra el síndrome de acumulación, que rara vez es aceptado de buenas a primeras.
Tratamiento
Una combinación farmacológica y terapéutica es lo ideal. Se motiva al paciente a reconocer sus obsesiones, y luego se entra a una psicoterapia cognitivo-conductual que lo ayude a controlar sus pensamientos y volver a la funcionalidad. También se incluyen técnicas de relajación acompañadas de medicamentos.
El proceso es largo pero prometedor, asegura Pinto, y se enfoca en disminuir el desorden, mejorar habilidades para tomar decisiones y adquirir hábitos organizacionales y técnicas de clasificación.
Cómo ayudar
La Fundación Internacional de Desórdenes Compulsivos estima que empezar por la limpieza de la casa es una causa perdida. Estará llena en cuestión de meses y la persona habrá desarrollado un apego mayor a sus posesiones y un rechazo más fuerte a los intentos de auxilio.
Pinto propone empezar por una valoración psicológica. “El síndrome puede ser producto de un trastorno obsesivo o una adicción previos. Es necesario investigar clínicamente para dar un correcto diagnóstico”.
En el caso de Wallace, Kellett cree que sin tratamiento, la compulsión hará que vuelva el caos, a pesar de las buenas intenciones de los vecinos.
Si la persona se rehúsa a la ayuda médica, hay que priorizar su seguridad. La acumulación puede crear un problema de salud pública y causar accidentes e incendios, dicen los reportes de la Asociación Americana de Psiquiatría. Es primordial realizar una inspección de la casa.
Coleccionismo y acumulación
Recolectar objetos puede ser un pasatiempo placentero. ¿Cómo saber cuándo se convierte en patológico?
“Si el acopio es funcional y con sentido, lo llamamos coleccionismo. En la acumulación patológica, en cambio, no hay valor estético ni lógico”, explica Pinto. (D.V.) (F)
Póngase a prueba antes de acumular
• Pregúntese si realmente utilizará ese objeto, no si podría usarlo. Si no ha empleado algo en un año y no recuerda dónde está, puede vivir sin eso.
• Más no significa mejor. Tener dos hornos microondas o tres bicicletas quiere decir que debemos desprendernos de lo que sobra.
• Organice los objetos por pilas o columnas, según su destino: para donar, para vender, para botar. No más categorías.
• No se tome demasiado tiempo. Si tiene que pasar por complicados procesos de decisión por cada objeto, nunca terminará.
• Está bien equivocarse. Haga una cosa a la vez, y si se ve llevando el mismo objeto de una pila a otra, deténgase, reenfoque y continúe.
6. Sea valiente. Habrá cosas que le dé pánico botar. Puede controlarlo, pero es necesario que se diga a sí mismo que quien no arriesga, pocas veces gana.
• Descubra a qué le teme. ¿Qué es lo peor que podría pasar si tira eso? Imagine alternativas, deshágase del objeto y fíjese si su predicción se cumple.
• Mantenga la calma. No logrará superar ese problema de la noche a la mañana. Céntrese en pequeñas victorias y disfrútelas. Sea un cajón o una habitación limpia, felicítese.
• Mantenga el entusiasmo: limpie algo cada día, aunque sea cinco minutos.
• Sea estricto. Organice su tiempo y no se permita hacer nada que le guste si antes no ha limpiado u ordenado.
• Tenga claro cuándo pedir ayuda. La acumulación compulsiva puede indicar otro problema y requiere tratamiento. Pero si su familia, amigos o pareja le dicen algo, no se enoje ni ofenda, pida ayuda profesional o deje que ellos lo hagan por usted.
Acumuladores se transmite por Discovery Home & Health (canal 229) los domingos a las 21:00 y los jueves a las 11:00 por Discovery Home & Health HD (1229).
Fuentes: TheGuardian.com; Glenda Pinto Guevara, psicóloga clínica, terapeuta TREC (Pareja, Familia, Niños, Adolescentes y Adicciones). Teléfonos: 232-4066 y 099-961-2322.