Camine con seguridad
Una caminata es la actividad física ideal, su flexibilidad permite realizarla en cualquier lugar. Hay unas zapatillas novedosas.
Caminar es una de las actividades físicas aeróbicas más comunes en todo el mundo independientemente de la edad. Muchos lo hacen regularmente para perder peso o mantenerse en forma.
Según la Asociación Médica Americana de Podiatría (APMA por sus siglas en inglés) antes de empezar a caminar debe realizar algunos ejercicios de calentamiento sencillos porque pueden añadir flexibilidad a los músculos. “Es apropiado girar el cuerpo por la cintura, en un movimiento lento de hula-hula, y unos pocos ejercicios de tocarse las puntas de los pies o doblar las rodillas”.
También es importante caminar con un buen calzado de preferencia recomendado por el médico traumatólogo quien le dirá cuál es el apropiado de acuerdo a las patologías que presenta.
Desde hace tres años en los EE.UU. salieron a la venta unas zapatillas que parecen ser un guante diseñado para ajustarse a los cinco dedos del pie. Sus creadores, según datos en internet, afirman que están diseñadas para mejorar la mecánica del pie de forma natural y ser calzadas tocando la planta del pie directamente con la suela de la zapatilla.
La plantilla, refieren, es un medio de ayuda para compensar las desviaciones fisiológicas, entonces aquel que tiene el pie muy plano, tendrá que acostumbrar el pie de forma gradual a estas mientras los músculos se adaptan y se fortalecen.
Sin embargo, dice el traumatólogo Ángel Auad Saad, aunque son suaves, lo más parecido a caminar descalzo con protección, en una superficie no apta como muchas de nuestras calles no son beneficiosas porque se puede realizar un esguince del pie, luxación de los dedos o fracturas, debido a que es más fácil una torsión, inversión o flexión forzada de los dedos al estar individualizados.
Intensidad variable
Toda caminata para el médico cardiólogo y deportólogo Richard Salmón, quien es presidente de la Sociedad Ecuatoriana de Cardiología Núcleo del Guayas, se la puede realizar con intensidad variable de acuerdo a la velocidad que se imprima y al lugar donde se la practique.
Si es realizada en un piso de concreto esta tiene algunos inconvenientes por su dureza. Por eso hay que usar un calzado adecuado porque el impacto sobre articulaciones es mayor.
Es importante conocer también las diferencias y beneficios que existen si se camina sobre arena seca, húmeda o dentro del mar. O si lo hace con zapatillas o sin ellas.
Caminar descalzo en la arena seca, por ejemplo, ayuda mucho al fortalecimiento muscular. El impacto es mínimo ya que la arena suelta se adapta rápidamente a la forma del pie. Se gasta el doble de energía pero se obtiene mejores resultados en la resistencia y fuerza muscular.
En cambio, si se camina sobre arena húmeda esta ofrece una superficie más estable, y talvez sea la ideal para iniciar sus ejercicios. Hay que tener cuidado con el desnivel que tiene y obliga al cuerpo a compensar su centro de gravedad ocasionando eventualmente dolores en la cadera o región lumbar.
Ahora, si caminamos dentro del agua, agrega Salmon, nuestro esfuerzo estará de acuerdo a la profundidad. “Si el agua nos llega a los tobillos prácticamente es como si estuviéramos fuera del ella, pero tendríamos una sensación de frescura en nuestros pies. Y si nos llega a las rodillas habrá una resistencia que será mayor cuando el agua está a la cintura o a nivel de los hombros”, asegura.
(S.M.de.C.)
consejos
Beneficios del caminar
Ayuda a disminuir la presión arterial sanguínea en los hipertensos, fortalece al corazón y baja los riesgos de la arteriosclerosis al disminuir el colesterol malo (LDL), además aumenta el bueno (HDL). También previene la osteoporosis y baja de peso, según el cardiólogo Richard Salmon.
Respiración en espacio libre
Es importante caminar en lugares abiertos y sin ninguna polución. Al respirar, inmediatamente el organismo capta el oxígeno que necesitan los músculos produciéndose un equilibrio o estado estable entre el aporte y la demanda.