En pleno crecimiento

Guayaquil suma nuevos proyectos hoteleros que están ayudando a construir este gran destino de negocios y convenciones.

El momento que vive el Guayaquil turístico es histórico. En la actualidad existen al menos cuatro nuevos hoteles de importancia que están afianzando sus cimientos en este destino a orillas del río Guayas, situación que exhibe el destacado crecimiento que mantiene como destino de viajes de interés nacional e internacional.

Holbach Muñetón, presidente de la Cámara Provincial de Turismo del Guayas, indica que esto se debe a que el país y la ciudad generan confianza para los inversionistas. “Los inversionistas nunca descansan, y en esta ciudad encuentran grandes oportunidades”.

Esto motiva que Guayaquil atraiga proyectos que confían en el atractivo que despierta la ciudad, principalmente, como destino de convenciones, congresos, ferias, reuniones y negocios.

“Es bueno que lleguen más hoteles. Es positivo que crezca la competencia. Esto provocará que el nivel de servicio crezca, ya que muchos de esos hoteles llegan con metodologías de trabajo venidas del extranjero, acostumbradas a la excelencia”, considera el líder gremial porteño.

Junto al río

Uno de los proyectos más destacados es el hotel boutique Giardini, cuyos cimientos se instalan en el Malecón Simón Bolívar, a la altura de las calles Imbabura y Panamá.

Sus 19 pisos estarán destinados a lobby (1 piso), parqueos (6), hotel con habitaciones y suites (5), suites para residencias (3), departamentos residenciales (2), áreas sociales (1) y terraza con piscina y bar (1).

Para diseñarlo, el arquitecto Luigi Lantermo Fernández investigó las tendencias en edificios ecológicos; él resalta el diseño como elemento vital de esta obra que se abrirá a mediados del 2016, bajo la sociedad de la familia Lantermo y la constructora Fractales, representada por Vinicio Suárez.

“El diseño está presente en grandes ciudades como Nueva York. Allá cada quiosco, cada esquina, cada espacio busca destacarse con el diseño”, comenta Lantermo Fernández, quien recorrió también ciudades como Berlín, París, Barcelona y Santiago de Chile para nutrirse de tal tendencia.

La excelencia en esos aspectos provocó que el hotel boutique Giardini fuera aceptado como miembro en la cadena Design Hotels, con sede continental en Nueva York. “Solo el 5% de las solicitudes acepta la cadena. Y es la primera vez que aceptan un hotel solo por los planos”, recalca Lantermo Fernández, quien considera que este establecimiento ayuda a tallar el denominado Barrio del Arte, que por iniciativa del Municipio se desarrolla en la calle Panamá con galerías, restaurantes y sitios de distracción.

Con los suizos

La cadena hotelera Swissôtel también tiene la vista puesta en el malecón del Puerto Principal, a la altura de la calle Luzárraga, ya que allí se construyen las dos torres de las llamadas Swiss Towers, que en sus 40 pisos albergarán departamentos personalizados, habitaciones ejecutivas, 30 pisos de oficinas, parqueos, pista de trotar, spa, gimnasio, piscinas, centro de negocios, restaurantes, bares y demás instalaciones.

Luis Villacrés Smith, presidente del directorio del Swissôtel, anunció que la primera etapa estaría lista para fines del 2017, para convertirse en las torres más altas de la ciudad (190 metros), superando a The Point, que tiene 137 metros.

La primera fase corresponde a la torre donde estará el hotel con 300 habitaciones, 120 departamentos y 1.040 estacionamientos. Mientras, la segunda etapa, que estaría lista diez meses después de la primera, será otra torre que tendrá 30 pisos de oficinas, de entre 100 y 700 metros cuadrados. Esta obra será el tercer Swissôtel de Sudamérica, después del de Quito y Lima.

En Samborondón

El desarrollo hotelero también impacta en el contiguo cantón Samborondón. La cadena Oro Verde está adecuando el reconstruido edificio del Hospicio del Corazón de Jesús, ubicado en el Parque Histórico, para operar allí el denominado Hotel del Parque.

El grupo hotelero es el aliado estratégico que escogió la Empresa Pública de Parques Urbanos y Espacios Públicos para el proyecto, que estará listo este año. Tendrá 44 habitaciones, sala de lectura con bar, gimnasio y otros espacios.

El hotel mantendrá intacta la estructura original del hospicio, construido en 1889 en el centro de Guayaquil. El hotel boutique buscará ofrecer al turista un servicio de primera, conjugando armónicamente lo tradicional y lo moderno, todo esto inmerso en el gran atractivo que constituye el Parque Histórico como vitrina de la cultura y naturaleza de este territorio.

Las buenas noticias continúan, ya que muy cerca se construirá, a partir de junio, el hotel Marriott, en un área de seis mil metros cuadrados en la avenida principal del sector Los Arcos, diagonal al Teatro Sánchez Aguilar.

Esta iniciativa es parte del proyecto Plaza El Prado, una obra que contempla, además, la construcción de cuatro edificios para oficinas y áreas comerciales en 19.500 m², y dos subsuelos para un total de mil estacionamientos de vehículos.

“Esta área está creciendo mucho, tiene muchos negocios, esto va a ser un hotel exitoso”, señaló Bojan Kuner, representante de Marriott Licensing Company, cuyo establecimiento tendrá 200 habitaciones, salones de eventos y conferencias. La inversión que se realizará para esta obra es de alrededor de $ 30 millones, y estará a cargo de la constructora Inmomariuxi.

Buró de convenciones

Holbach Muñetón, presidente de la Cámara de Turismo del Guayas, agrega que estos hoteles fortalecerán la capacidad de Guayaquil como destino de negocios, propósito que desde marzo será potencializado con la operación del buró de Convenciones y Visitantes de Guayaquil, que el Municipio de Guayaquil impulsará para afianzar a la ciudad como destino de este tipo.

“A partir de marzo, los hoteles de primera y de lujo aportaremos con $ 2 por cada noche de hospedaje que cobremos. Así ayudaremos al presupuesto de esta nueva entidad”, que estará a cargo de la Empresa Pública de Turismo de Guayaquil, que funciona desde este mes de enero.

“Guayaquil vive un gran momento gracias a todas estas buenas noticias”, concluye Muñetón. (M.P.) (I)