Glorias restauradas
El antiguo Hospicio Corazón de Jesús podría convertirse en un hotel boutique. El edificio patrimonial es uno de los atractivos arquitectónicos del Parque Histórico Guayaquil.
Luego de casi 30 años desde que se iniciaron las operaciones de rescate del antiguo edificio del Hospicio Corazón de Jesús, se avizora su suerte final. El otrora asilo de ancianos, durante 1892 - 1982, daría cabida a un hotel-boutique, dentro de la zona urbano-arquitectónica del Parque Histórico Guayaquil (en Samborondón). En el lugar es notoria la fachada de la edificación con varios de sus elementos originales y la capilla del hospicio, abierta a los visitantes y el área mejor conservada del inmueble.
Historia
El Hospicio es una de las pocas construcciones de madera que quedan del Guayaquil de finales del siglo XIX e inicios del siglo XX. Estaba ubicado en la calle que antaño fue conocida popularmente como Las Lágrimas (lo que actualmente es la calle Julián Coronel), porque a lo largo de ella también estuvieron la Cárcel Municipal, el Hospital Civil (Luis Vernaza) y el Cementerio General. Fue construido en 1889, gracias a la donación de 20.000 sucres de Manuel Galecio y una operación bancaria de parte de la Junta de Beneficencia. El nombre es en memoria de Manuela de Jesús Pereira, esposa de Galecio. Ambos fueron benefactores de esta obra, según la Guía Histórica de Guayaquil de Julio Estrada Ycaza.
Conserva sus dos jardines centrales y la capilla, la cual ofrece misa los domingos, a las 17:30.
Hotel-boutique
Cuando la Empresa Pública de Parques Urbanos y Espacios Públicos (EPPUEP) asumió la administración del Parque Histórico (el cual ha estado bajo el mando del Banco Central del Ecuador y Ministerio de Turismo), realizó un análisis de varios aspectos, entre ellos el uso de las viviendas patrimoniales ubicadas en el recinto. “Salió la posibilidad de convertirlo en un hotel por sus características (al ser un asilo tenía habitaciones)... También hicimos un sondeo con estudios hoteleros locales y recibimos una respuesta favorable para el alojamiento, por el entorno, el edificio y la ubicación”, explicó Geovanny Rodditi, gerente comercial de la EPPUEP.
Hasta el viernes pasado, las empresas interesadas en la ejecución del proyecto entregaron sus propuestas. Las condiciones para participar incluían conservar las piezas arquitectónicas rescatadas y que las adecuaciones, el mobiliario y la decoración sean congruentes con la época de funcionamiento del asilo.
Parte de la estrategia turística que implica la obra sería otorgarle nuevos usos a las edificaciones históricas restauradas y por restaurar en el parque, para complementar los servicios del nuevo hotel. Está previsto que la casa Julián Coronel pueda manejar la cocina y el restaurante y que las otras viviendas posiblemente ofrezcan salones de eventos o de conferencias. Para de esta manera, aclara Roditti, crear una “ciudad hotel”.
Los gestores
La residencia de ancianos fue parte de un proyecto impulsado por el Banco Central del Ecuador (BCE) de rescate arquitectónico de viviendas con valor histórico, incluidas las casas de Julián Coronel, de la familia Lavayen Paredes (Casa Verde) y el Banco Territorial. Los gestores de esta tarea fueron el historiador Julio Estrada Ycaza, Olaf Holm (exdirector del Museo Antropológico del BCE) y Hernán Crespo (exdirector del Museo del BCE-Quito).
Dio la casualidad que mientras la Casa Verde (de la familia Lavayen Paredes) era desarmada para su preservación, “la Junta de Beneficencia iba a demoler el hospicio”, explica la arquitecta Antonieta Palacios, quien integró el equipo a cargo de desmantelamiento de la capilla y el asilo. Palacios también es
coeditora de la Guía Histórica de Guayaquil, de Julio Estrada Ycaza, junto a Cecilia Estrada Solá, hija del historiador. En los letreros informativos del Parque Histórico se aclara que la demolición sucedería en 1982 “para la construcción de la nueva edificación de hormigón armado en el mismo terreno”, finalmente, los restauradores se hicieron cargo del inmueble.
La intención de colocarlas en un solo lugar también es de Estrada, recuerda Melvin Hoyos, director de Cultura y Promoción Cívica del Municipio de Guayaquil. Según Hoyos, el historiador “sintió la necesidad de salvar los patrimonios de la ciudad”, reuniendo los museos y bibliotecas en un centro cultural único, ante el panorama político de 1984. Esto se realizaría en un terreno perteneciente al BCE, en La Puntilla (Samborondón), a lo cual se sumó la idea de recrear el “Guayaquil del ayer”, con las casas y elementos más emblemáticos de inicios del siglo XX. Cuando Estrada sale del BCE, el arquitecto Fredy Olmedo Ron reactiva sus ideas, pidiendo la colaboración de varios arquitectos, entre ellos Pablo Lee, explica Hoyos. Así nació el Parque Histórico Guayaquil.
“La idea original es sin lugar a dudas de Julio Estrada Ycaza, fruto de las inquietudes que tuvo de años de rescatar la antigua arquitectura de Guayaquil y la persona responsable de cristalizarla es Fredy Olmedo”.