Ambientes seguros
El problema del acoso sexual es complejo y más frecuente de lo que se suele reconocer en el mundo empresarial. Las personas afectadas no suelen denunciar estos incidentes por miedo a perder su trabajo. Por ello, es fundamental una cultura de transparencia, generando los espacios apropiados para que las personas puedan expresar estos incidentes. Así mismo, se debe promover la confianza entre todos los miembros de la organización, garantizando la confidencialidad del proceso, verificando la veracidad de la información y actuando de forma diligente para corregir dichos procedimientos. A continuación, se describen algunas recomendaciones para generar una cultura de prevención:
1. Generar protocolos claros de conducta para eliminar comportamientos ambiguos entre los trabajadores.
2. Tener reuniones en espacios abiertos en los que existan campo visual claro, y analizar espacios de la empresa que pueden representar un riesgo para el trabajador.
3. Comunicar a los trabajadores los canales para denunciar comportamientos de abuso. Se deben proporcionar guías claras para recibir y responder a quejas.
4. Propiciar estilos de liderazgo apropiados. Uno de los factores detonantes para este comportamiento es el abuso del poder, en el que los jefes aprovechan de su ascendencia sobre la otra persona para cruzar límites impropios.
5. Generar credibilidad en que la empresa no hace oídos sordos a las denuncias, sino que sanciona fuertemente estos incidentes.
6. Capacitar un equipo de profesionales locales, profundizando en la comprensión del abuso y formas de prevención, desarrollando habilidades para reconocer interacciones abusivas y aspectos de manipulación y control. Se requiere instrucción en la forma adecuada de relacionarse con los demás, en cómo detectar patrones de conducta que suelen llevar al abuso o acoso sexual.
Crear una cultura de prevención es la estrategia más eficaz, pues ayuda a abordar el problema antes de que ocurra. Desde el inicio del proceso de selección del personal se debe pedir referencias de comportamientos apropiados y comunicarle al entrevistado la importancia que damos a la ética en las relaciones interpersonales. Todos somos responsables de aportar con ideas y solucionar potenciales conflictos, advirtiéndolos antes de que ocurran para tomar medidas apropiadas. (O) carlosmunoz@humane.edu.ec, dhi.com.ec