Bienvenido 2015
Nada mejor que comenzar el año mirando al cielo y agradecer al Altísimo por todos esos botones de rosas perfumadas y turgentes que nos tocó vivir. ¿Que había espinas? Sí, esa es la vida, “unas veces de cal y otras de arena”.
Es el momento de soñar en los nuevos proyectos y pensar en un buen plan para hacerlos realidad. Todo es posible si estamos en orden y en paz. En orden interno. Lo que significa que debemos de hacer acopio de una buena dosis de voluntad, y como la voluntad se fortalece con los buenos hábitos, ahí vamos entonces a prender el motor de la energía personal para conseguir lo que nos proponemos.
• Si uno de sus propósitos es dejar de beber, aplique la sabia regla que practican los grupos de Alcohólicos Anónimos: “Solo por hoy no lo haré”. Es una invitación a vivir en el presente; impone disciplina, conciencia y perseverancia. Pero recuerde, “el que persevera, triunfa”.
• Si la meta es dejar de fumar y no tiene quien lo guíe, busque ayuda en los grupos de Narcóticos Anónimos. La acción correcta se fundamenta en los buenos pensamientos, que son los que conducen a los buenos hábitos. Se lo aseguro. ¡Éxito garantizado!
• Todavía estamos a tiempo para llamar telefónicamente o enviar una comunicación formal a quien, por los correcorre de último momento, no lo hicimos. Lo puede hacer hasta el martes 6 inclusive; pero que no sea por mensajito ni por “whatsapazo”. No borre con el codo lo que se quiere edificar cortésmente.
• En el ámbito de la oficina, no es de buen gusto iniciar una conversación tendiente a señalar los errores de otros. “¿La viste cómo estaba vestida en la fiesta de fin de año?” Cualquier situación, por incómoda que haya sido, hay que tratarla con prudencia. Puede comentarlo a solas con el jefe de Recursos Humanos, pero no “eche leña al fuego”.
• El entusiasmo es el punto de partida de todos los grandes logros. Llénese de entusiasmo y únase a los grupos de numismáticos y filatélicos; no, no es cosa del pasado, la cultura no es cuestión de moda. Considere además practicar un deporte, aprender dibujo o involucrarse en un grupo de ayuda social.
• Si todavía se sigue reuniendo con los amigos, no se vaya nunca del restaurante sin pagar lo que le corresponde.
Su mejor carta de presentación siempre será ser respetuoso y cordial. Y no lo olvide: “Barco parado, no gana flete…”. (O)
