A30_ 08_09_2013 LR DOMINGO

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E S A LU D la re vista 29 ......................... consistente para una lesión de tobillo es haber sufrido un esguince previo. Este hecho por sí solo pone de relieve la importancia de darles a las lesiones del tobillo el tratamiento que merecen. Diagnóstico correcto El aspecto de mayor importancia, destacó Kaminski, es asegurarse de que la lesión sea diagnosticada correctamente para determinar su alcance y, a su vez, dictar la terapia apropiada. Esto no significa necesariamente que se debe correr a la sala de emergencias y someterse a una radiografía por cada tobillo to rc i d o. Aunque entrenadores, instructores y médicos deberían saber cómo practicar un examen apropiado, haciendo una revisión en busca de deformidades, inflamación, decoloración, dolor al tacto y el rango de movimiento del tobillo; la capacidad del pie para moverse en todas sus posiciones normales. Si bien se ordenan rayos X típicamente para entre el 80% y 95% de los pacientes que acuden a la sala de emergencias con una lesión de pie o tobillo, no amerita una radiografía a menos de que exista una deformidad obvia, sensibilidad ósea o incapacidad para soportar peso o caminar cuatro pasos inmediatamente después de la lesión, dice el informe de la Asociación Nacional de Entrenadores de Atletismo. Los rayos X no revelan daño a tejidos suaves como ligamentos y tendones, los que más se lesionan en un esguince de tobillo. Tampoco es de mucha utilidad una resonancia magnética. ¿Qué debemos hacer? Inmediatamente después de la lesión en el tobillo, empiece con las técnicas aceptadas universalmente: no apoyar el pie lesionado; elevarlo, si es posible, por encima del corazón; envolverlo en un vendaje de compresión y aplicar frío. Existen varias formas de aplicar hielo a un tobillo lesionado: paquetes de hielo, inmersión en agua helada, aplicación de tazas de hielo o bolsas congeladas de fréjoles, paquetes químicos fríos, así como aerosoles fríos. Aplique frío durante 10 a 20 minutos cada vez, retirándolo después durante 10 minutos y volviendo a aplicarlo más tarde. Cuando use un paquete de hielo o paquete químico frío, cubra primero la piel con un trapo húmedo para evitar daño al tejido. El hielo también puede ser usado para reducir la incomodidad antes de hacer ejercicios prescritos para fortalecer un tobillo lesionado. Ya no se recomiendan periodos largos de descanso. Actualmente, el énfasis está en una “rehabilitación funcional: hacer que los pacientes se muevan tan pronto sea posible, practicando ejercicios de caminata y mejorando la movilidad de la articulación”, dijo Kaminski. Lo más importante de todo, con frecuencia lo más olvidado, es el entrenamiento de equilibrio, que empieza con pararse en un pie (el lesionado) sobre una superficie firme y pareja, y después sobre una superficie de hule, espuma o cama elástica, primero con los ojos abiertos y después, cerrados. “La idea consiste en obligar al tobillo a moverse bajo condiciones más inestables, como las que se encontrarían en una acera, campo o la playa”, dijo Kamisnki. Aunado a lo anterior, es de utilidad fortalecer las estructuras que soportan la estabilidad y flexibilidad del tobillo. Personas de edad más avanzada, tomen nota: los problemas de tobillo son un factor de riesgo común para caídas entre personas de la tercera edad, y mientras más fuertes sean los músculos en la parte inferior de la pierna, mayor soporte suministran para los tobillos. Una forma barata de impulsar la fuerza del tobillo consiste en envolverse una banda de resistencia o toalla debajo del tercio anterior del pie y, sosteniendo los extremos de la banda o toalla con fuerza, mover el pie en cada dirección: arriba, abajo, a la derecha y a la izquierda 10 veces. Haga este ejercicio tres veces al día. Y por supuesto, a menos de que usted sea una modelo de pasarela, ¡manténgase lejos de esos tacones altos! pE “Lo que debería abandonarse es la tentación de intentar pararse y caminar hasta que pase el agudo dolor de un tobillo torcido. De hecho, en años pasados, eso se recomendaba a menudo a los atletas. Sin embargo, intentar caminar con un tobillo herido es precisamente el enfoque erróneo, ahora dicen los entrenadores de a t l e t i s m o. ” ESPECIAL de la revista 29


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