Rutas de lo paranormal
América Latina presenta destinos que, de manera espontánea, han desarrollado un toquecito tenebroso que atrae a los viajeros.
Isla de las muñecas, Costa Rica
Para espantar a un espíritu
Entre las diversas maravillas naturales de México, existe una zona denominada Xochimilco, compuesta por casi 190 kilómetros de canales navegables, islas, naturaleza y misticismo.
Allí, 20 km al sur del Distrito Federal, existe una isla tenebrosamente célebre por su historia y, sobre todo, por el paisaje aterrador, compuesto por una incontable cantidad de muñecas sucias y mutiladas colgando de los árboles.
Los mexicanos la conocen como la Isla de las Muñecas, un paraje que al parecer solo fue habitado por un hombre llamado Julián Santana Barrera durante más de 25 años.
La leyenda dice que Santana comenzó a colgar muñecas en la isla luego de encontrar el cadáver de una jovencita que, al parecer, se había ahogado en un canal cercano a su casa. De esa manera Julián quería alejar al espíritu de la muchacha, ya que podía escuchar su voz y pasos merodeando por ese espeso bosque.
En 2001, Santana murió de un infarto y cayó al canal, poco antes de haberle comentado a su sobrino que había visto a una sirena de río que quería llevárselo. Pero las muñecas quedaron colgadas.
Sanatorio Durán, Costa Rica
¡Estado crítico!
En el mundo del misterio siempre estarán de moda los hospitales abandonados. Este fue creado en 1918 para pacientes con tuberculosis, pero la erupción del volcán Irazú de 1973 provocó que cerrara. Se dice que los espíritus de los pacientes fallecidos y una monja merodean los pasillos. Está situado en Tierra Blanca de Cartago, área aislada y montañosa, que incluso ha atraído a sectas satánicas debido a su presunta mala energía.
Hotel del Salto, Colombia
En el acantilado de los suicidas
Construido en 1924 en las afueras de San Antonio de Tequendama, el hotel era frecuentado por la clase más pelucona de Colombia debido a su elegancia y su peculiar ubicación: a orillas de un acantilado. Lo curioso es que ese precipicio fue el escenario de varios suicidios de personas que se lanzaron al abismo. Tales almas, al parecer, mantienen ese edificio como “embrujado” y escenario de historias de fantasmas y gritos que se escuchan en los salones y pasillos.
Ni siquiera la bella cascada frente al hotel provoca que la atmósfera sea agradable, ya que los visitantes que aún llegan dicen sentir una energía negativa.
Ese inmueble también funcionó como una terminal de ferrocarril y, luego, como un restaurante, pero fue abandonado en 1990. Sin embargo, hoy aloja la Casa Museo Salto de Tequendama Biodiversidad y Cultura, para concienciar acerca de la conservación y cuidado de la naturaleza de la zona.
Iglesia de Santa Felicitas, Argentina
Templo para un corazón roto
En 1862, Felicitas Guerrero Cueto contrajo matrimonio con Martín de Alzaga, quien era propietario de una gran casa de la calle Larga (hoy, av. Montes de Oca), en el barrio de Barracas, Buenos Aires.
El matrimonio fue por conveniencia, ya que entonces Felicitas simpatizaba con un señor llamado Enrique Ocampo.
En 1869 murió Félix, su hijo, de fiebre amarilla. En 1870, un segundo hijo nació muerto. Un par de semanas después falleció su marido; Felicitas tenía 24 años.
Ella heredó una gran fortuna, por lo que después de su luto llevó una vida aristocrática. Fue entonces cuando Enrique Ocampo le propuso matrimonio. Sin embargo, Felicitas se inclinó por otro pretendiente. Ocampo enloqueció de celos y terminó asesinándola de un disparo. Y él se suicidó con la misma pistola. Era enero de 1872.
Los padres de Felicitas mandaron a construir la iglesia en su honor, en la cual, según la leyenda, su fantasma aparece llorando debido a su corazón roto. Hoy, allí también funciona un museo que incluye objetos personales.
Pueblo fantasma de Humberstone, Chile
Minas de una riqueza pasada
La inhóspita zona de Atacama, que tiene el desierto más seco del mundo, albergó entre 1830 y 1930 una pequeña población en torno a minas de salitre. Allí, hombres, mujeres y niños aparentemente fueron explotados como mineros (algunos quizás hasta la muerte). Hoy, Humberstone es una ciudad fantasma que en 2005 fue declarada Patrimonio de la Humanidad.
Los turistas que recorren sus calles en paseos diurnos y nocturnos observan los decadentes restos de un pueblo que a finales del siglo XIX ostentó riqueza, pero que actualmente reporta sucesos paranormales que cubren de misterio sitios como el teatro, la iglesia, el hotel o las vetustas instalaciones mineras. Dicen que se escuchan ruidos y se puede sentir la presencia de los mineros que al parecer fallecieron allí.
Catacumbas de San Francisco, Perú
Herencia de la fe franciscana
¿Quién no les tiene miedo a las tumbas en pasajes subterráneos? Bajo las capillas de la hermosa iglesia de San Francisco de Asís en Lima se extiende una red de estrechos pasadizos que brindan acceso a unas bóvedas sepulcrales donde pueden observarse huesos que datan del siglo XVII.
En tales criptas reposan los restos de aproximadamente 25.000 personas relacionadas con la orden franciscana, según indican en el templo. Los viajeros que llegan pueden experimentar un recorrido singular que los lleva también hasta un osario con forma cónica de una profundidad de 10 metros, que muestra varios cráneos, tibias, peronés y fémures, todos muy bien ordenados.
Durante el recorrido parece sentirse una fuerte energía contenida entre esos antiguos muros.